Bilbao - La Ponencia de Memoria y Convivencia del Parlamento Vasco vuelve a reunirse hoy, dos meses y medio después, con el reto de definir cómo va seguir desarrollando sus trabajos. Sin un orden del día sobre la mesa, los grupos parlamentarios presentes en la misma -todos excepto el PP- se verán de nuevo las caras tras la última reunión del pasado 17 de diciembre y después de que PSE y EH Bildu expresaran de forma pública sus discrepancias respecto a las conclusiones de este foro. En dicho encuentro, los grupos presentaron sus aportaciones al documento síntesis elaborado por la presidenta de la ponencia, Ana Oregi (PNV), con el fin de llegar a consensos en esta materia. Sin embargo, desde entonces las espadas permanecen en alto. Buena parte de las discrepancias giran en torno a la exigencia del PSE de que las conclusiones se ajusten al suelo ético acordado en la pasada legislatura. El mismo aboga por una paz con memoria y por reconocer a las víctimas del terrorismo. EH Bildu acusa por su parte al partido de Idoia Mendia de tratar de arruinar los trabajos y buscar condicionar el resultado final.

En un comunicado emitido el pasado viernes, el PSE expresó su deseo de que la ponencia siga trabajando en el futuro y citó como uno de sus principales retos afrontar la convivencia. “Y ahí hemos constatado una posición compartida sobre que nunca más debe producirse un asesinato ni una amenaza para imponer un proyecto político, pero no todos los grupos asumen que nunca antes debió suceder”. Agregó que “no se trata de cambiar de mayorías sino de que no sean rebajadas ni diluidas las que ya han sido largamente trabajadas en relación a ETA y a otras formas de terrorismo y de vulneraciones de derechos”. Por su parte, el portavoz parlamentario socialista, José Antonio Pastor, afirmó el sábado que no cree que sea “imposible” que EH Bildu acepte que matar fue “injusto”. Opinó que ese mundo está “haciendo esa reflexión y lo harán”, aunque no en este momento, por lo que pidió trabajar “sin prisas y urgencias porque el objetivo político no tiene que ser llegar ya mismo a un texto político”.

También en Radio Euskadi, el parlamentario de EH Bildu Iker Casanova defendió que su partido tiene “muy claro” el rechazo a todas las formas de la violencia y la necesidad de hacer “contribuciones, pero no condicionadas a lo que los demás hagan”. Agregó que EH Bildu “todos lo días hace cosas por construir la convivencia pueblo a pueblo, barrio a barrio y diálogo a diálogo”, lo que da resultados. “Lo que no aporta son los discursos de ataque al rival porque llevan a un bucle”, zanjó.

Desde el PNV, Josune Gorospe llamó a “ir salvando los escollos” y avanzar en acuerdos, “sin prisa”; Elkarrekin Podemos defendió seguir trabajando “con seriedad, sin prisas, agobios y jaleos electorales”; y el PP de la CAV reivindicó el acuerdo alcanzado en 2012 en torno al suelo ético, un “mínimo” al que EH Bildu “tiene que llegar”.

Búsqueda de consensos La Ponencia de Memoria se constituyó el 8 de marzo de 2017 con el objetivo de buscar amplios acuerdos en torno a las víctimas, la memoria, la política penitenciaria, la convivencia y los derechos humanos. Antes del pasado verano concluyó la fase de las comparecencias que cada grupo propuso y la Presidencia redactó un documento de síntesis con las aportaciones de cada partido, que después presentaron alegaciones.