Bilbao - El Sindicato Profesional de la Ertzaintza (Sipe) cargó ayer contra el director de la Policía vasca, Gervasio Gabirondo, a quien acusa de “cobarde y visionario prepotente” a raíz de las declaraciones realizadas por este el pasado viernes en Euskadi Irratia en las que admitía que la carga de la Ertzaintza en la que resultó mortalmente herido el joven Iñigo Cabacas fue incorrecta a la vista del resultado.

En una nota pública, Sipe aseguraba que “solo su abierta incompetencia y sobrada prepotencia le pueden llevar a decir esto después de casi tres años”. El sindicato, además, se preguntaba: “¿Piensa que va a gobernar Bildu y se está haciendo un hueco?” , para responder a continuación que “para algunos el sillón y la traición están por encima de todo, ¡qué desgracia!”.

En la nota Sipe señalaba que “puede que nos equivoquemos”, pero “no está probado que el Sr. Cabacas falleciera por el impacto de una pelota de goma y este visionario haciendo el caldo gordo”. El sindicato de la Ertzain-tza recordaba que todavía no hay una resolución judicial del asunto y que serán los jueces quienes “determinarán si la causa de la muerte fue una pelota u otro objeto, y de ser una pelota, analizarán la actuación y obrarán en consecuencia”.

Sipe se retrotrajo a los incidentes ocurridos en Bilbao con motivo de la cumbre económica de marzo de 2014. El sindicato señalaba que entonces Gabirondo sí tomó decisiones, “ y su decisión fue permitir que quemara Bilbao un grupo que más parecía un comando de asalto que un grupo de manifestantes. Su incompetencia, su diarrea mental y una buena dosis de acojono, a lo único que llevó es a que la mesa de crisis deseara suerte a los ertzainas que estaban en la calle viendo cómo ardía Bilbao, sin comer, sin poder ir al baño, sin ningún relevo, sin material adecuado, etc. ¿Y tú vienes a dar lecciones?”.

Acababa la nota señalando que “si queda alguien con sentido común, que mande a este incompetente a tomar por donde más amargan los pepinos”. Por todo ello, el sindicato Sipe exige la destitución de Gervasio Gabirondo y la dimisión de la consejera vasca de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia. - J. Núñez