Bilbao. Fue una de las primeras polémicas del mandato de Rodolfo Ares en el Departamento de Interior. El 10 de noviembre de 2009, DEIA desvelaba que en la comisaría de Erandio permanecían retenidos centenares de buzos de la Er-tzaintza recién salidos de fábrica. El motivo para este secuestro era el distintivo que portaban en la manga izquierda: una ikurriña en forma de orla con la E gótica de Euskadi en el centro. Tan solo un par de días después, y cuando la necesidad de uniformes se hacía perentoria para los agentes, los gestores del PSE ordenaron la retirada del escudo de los 2.500 buzos. Como consecuencia, los ertzainas que los vistieron lucieron una antiestética y pegajosa mancha en la manga.

Ahora, más de tres años después, y tras el relevo en el Gobierno vasco, la E capitular ha vuelto a la actualidad de la Policía vasca. El sindicato ESAN, uno de los que con mayor virulencia criticó la retirada de este símbolo, propuso en el Consejo de la Ertzaintza del pasado 18 de febrero, el primero de la presente legislatura, la reposición del escudo y que todos los nuevos uniformes lo incorporen. "Lo mismo que el anterior departamento lo arrancó de muchas prendas queremos que se vuelva a colocar", dijeron sus portavoces.

El secretario general de la central, Eneko Urkijo, aseguró a este periódico que van a insistir en esta demanda "para que se vuelva a poner la E en la ropa, los vehículos y en todas partes". Argumentaba para ello "la tradición de este símbolo por su relación con la histórica Ertzaña del 36". "La simbología es importante para nosotros", agregó, tras lo que destacó el desagravio que supondría la recuperación de la E gótica tras la polémica actuación de Rodolfo Ares.

Fuentes del Departamento de Interior consultadas no cerraron la puerta a esta iniciativa, aunque la supeditaron a diversos factores: "No decimos que no, pero hay que hacer una valoración presupuestaria para comprobar a cuánta gente afecta y qué cambio supone". Más aún en el momento actual, cuando "acabamos de cerrar unos presupuestos y aún no sabemos si se van a aprobar". Portavoces autorizados de la consejería que lidera Estefanía Beltrán de Heredia agregaron que, "por la parte simbólica no tenemos dudas, pero con la situación económica actual primero tendrán que entrar una serie de prioridades". Si al final se opta por recuperar este elemento, "habrá que establecer un calendario de periodificación en el tiempo" para ello.

El secretario general de ESAN rechazó el argumento económico para dilatar esta propuesta y opinó que "es absurdo porque colocar un logotipo supone una migaja, puede costar 20 céntimos cada uno". Sobre esta cuestión, el portavoz de ELA Tomás Rodríguez afirmaba que "ahora mismo nos preocupan mucho más los recortes que discutir sobre la necesidad de recuperar la E gótica". Añadía que "entonces ya dijimos que no nos gustaba que la retirasen, pero este es otro momento y, con lo que nos está cayendo, hay otras prioridades sobre la mesa".

Ikurriña oficial La retención y mutilación de una importante partida de buzos ignífugos de la Er-tzaintza generó una gran controversia en noviembre de 2009 a nivel sindical y también político, ya que el PNV llevó esta cuestión al Parlamento Vasco. El entonces consejero de Interior, Rodolfo Ares, trató de zanjarla aprobando dos órdenes, ambas del día 17 de dicho mes, en las que se establecía que el distintivo de manga de los uniformes y la ikurriña de los vehículos de la Er-tzaintza serían los que establece el Manual de Identidad Corporativa del Gobierno vasco, de agosto de 1999, que regula "el uso oficial de la bandera de Euskadi".

Con este paso, que contó con el aval del Consejo de Gobierno de Patxi López, Ares derogaba además el anexo sobre el distintivo de manga de la orden del 31 de mayo de 2007 de su antecesor en el cargo, Javier Balza, que incorporaba un emblema con "una ikurriña con una E característica de color negro en su interior". Esta orden, que está en el origen de los 2.500 buzos que fueron objeto de polémica más de dos años después, fue anulada por Ares pese a su carácter oficial, ya que fue publicada en el BOPV el 20 de junio de 2007. El Manual de Identidad Corporativa marca las medidas y colores oficiales de la "bicrucífera compuesta de aspa verde, cruz blanca superpuesta y fondo rojo", lo que se traduce en la ikurriña rectangular que luce hoy día la Policía vasca. La E se mantuvo, no obstante, en las matrículas de los vehículos y los buzos reflectantes de los agentes de tráfico por el elevado coste que suponía su sustitución.

Pese a aludir a la normativa vigente, la radical decisión de modificar 2.500 uniformes tuvo su origen en la percepción por parte de Rodolfo Ares del escudo con la E capitular de Euskadi como un símbolo nacionalista. Este distintivo fue el identificativo fundamental de la Ertzaña del 36, que hizo suyo el neologismo acuñado en 1896 por Sabino Arana para denominar a la patria vasca. Este histórico Cuerpo, antecedente de la actual Policía vasca y que nació al albur del primer Gobierno vasco del lehendakari Aguirre, adquirió cualidades casi míticas tras implicarse activamente en la Guerra Civil.