Bilbao. "Tenía un frontis delante y otro detrás cuando le daba". Así se mostró Juan Martínez de Irujo al terminó de la final del Manomanista, sin respuesta ante el vendaval de juego desplegado por Olaizola II. A pesar de que el resultado había sido el mismo que en la final previa, el delantero de Ibero añadió que esta vez había jugado mejor que el año pasado, algo que no le sirvió porque "a la hora de rematar no me ha salido nada". Además, Irujo reconoció que el material no había tenido nada que ver con su derrota y que prefería no comentar nada de ello: "Que hable el que ha hablado estas tres semanas, que se han puesto finos a hablar. Al final si hablo va a parecer que es excusa".

Desde el inicio, Irujo no estuvo cómodo, sin confianza. "La primera que me he jugado me ha salido mal, me he vendido y luego se me ha encogido un poco el brazo. Y para ganar una final o el rival no juega lo que sabe o tienes que hacer las cosas casi perfectas. Y yo no lo he hecho", comentó el de Ibero. El delantero de Aspe intentó recuperarse pero ayer no había nada que hacer. "Tenía un frontis delante y otro detrás cuando le daba. Aimar gozaba de derecha e izquierda, cogía mucha altura, se ponía muy bien y así es imposible. Yo le daba y me relajaba pensando que igual iba a pasar a dominar, pero él metía cintura y cogía altura en pared izquierda y yo tenía que recular. No he estado cómodo en ninguna fase del partido", analizó.

Esta es la tercera final que pierde el navarro en el frontón Bizkaia, sin embargo, esto no le preocupa. "Cada uno que saque las conclusiones que quiera. Es un frontón en el que he hecho buenos y malos partidos, como en todos. Es como si me dices que en todos los últimos siete de junio ha llovido, ¿el año que viene también va a llover?", declaró contundentemente el de Ibero.

Juan tampoco quiso poner el material como excusa, "porque me he quedado en siete". Aun así, criticó lo que se había comentado durante todo el campeonato. "Al final, con el material cada uno tira para su lado, pero por suerte o por desgracia ellos tienen más medios para expandir y llegar a más gente y parece que son los buenos. De aquí a cinco años seguiremos hablando de lo mismo", afirmó Irujo. Un hecho que no influyó en el resultado: "Aimar me ha ganado porque ha sido mejor".