BILBAO. Al RETAbet Bilbao Basket le quedan muy pocas bazas para alcanzar una plaza en la Copa y una de ellas pasa obligatoriamente por derrotar al Herbalife Gran Canaria este próximo sábado en el Bilbao Arena en el partido que abrirá el año en Miribilla. Desde hace una semanas se pensaba que este partido iba a ser decisivo para la clasificación para el torneo de Gasteiz. Sin embargo, las opuestas rachas de ambos equipos han provocado que los canarios, a los que solo les queda un partido en la primera vuelta, estén prácticamente clasificados con sus nueve victorias.

Y es que el Gran Canaria, que comenzó la temporada logrando su primer título con la Supercopa, ha logrado corregir sus cuatro derrotas iniciales como se esperaba de ellos. Desde entonces, suman nueve victorias en once partidos en la Liga Endesa, que se completan con siete triunfos en los ocho partidos de la primera fase de la Eurocup. En total, dieciséis triunfos en diecinueve partidos. El Bilbao Basket, en cambio, ha hecho todo lo contrario: tras su 4-0 inicial, lleva tres victorias en diez encuentros de Liga y tres en ocho de la Eurocup. O sea, seis de dieciocho.

Los canarios juegan hoy el primer choque del Top 16 en casa ante el Lokomotiv Kuban, pero eso no debe suponerles un desgaste que ofrezca esperanzas a los hombres de negro porque no lo ha supuesto en los dos últimos meses en los que la competición europea les ha servido para crecer en su juego y alcanzar una forma adecuada. Además, han reaccionado a la lesión de Darko Planinic con el fichaje de Ryan Hollins, pívot que ha llegado desde la NBA, lo que permite a Luis Casimiro tener siempre en cancha un quinteto poderoso y, ahora mismo, con mucho ritmo en las dos mitades de la cancha. Quizás es el equipo en mejor forma de toda la competición.

En el caso de los vizcainos, la Eurocup fue una rémora y, despojados de ellos, todos esperan que les pueda servir para mejorar en su rendimiento del fin de semana. Desde el punto de vista del Bilbao Basket, la victoria es obligatoria, pero no porque el Gran Canaria sea ya un rival directo para la Copa. El objetivo del equipo de Carles Duran, que quiere apurar sus opciones al menos hasta el derbi de la semana que viene, debe apuntar al Morabanc Andorra, que le precede con un partido de ventaja. El equipo pirenaico se mide el domingo al Real Madrid, que ayer cayó de bulto ante el Baskonia, y no parece un partido propicio para sumar, pero cuenta con el comodín de un último partido ante el Real Betis en su cancha en la que se mantiene imbatido esta temporada.

Más allá de la copa

A más largo plazo, el Andorra puede ser también rival del Bilbao Basket en la lucha por el play-off, en la que a partir de ahora los dos van a estar en las mismas condiciones. Además, otros equipos como el Fuenlabrada o el Betis pueden sumarse por detrás. La Copa llegará o no llegará, pero mantenerse cerca de los ocho primeros es fundamental para mantener viva la llama competitiva en el conjunto bilbaino y en su afición de cara a las citas de la segunda vuelta en Miribilla, por donde ya han pasado el Barcelona y el Real Madrid y el Baskonia no lo hará hasta la anteúltima jornada, allá por el mes de mayo.

En este sentido, el Bilbao Basket tendrá que encontrar esa mejor versión a la que Duran lleva apelando en las últimas semanas, pero solo ha aparecido de forma discontinua. La última derrota confirmó que el equipo no puede rebajar el listón en defensa porque cualquiera puede saltarlo. El Gran Canaria, con amenazas ofensivas por todas partes, será una prueba para comprobar hasta qué punto el conjunto bilbaino ha asimilado sus nuevas circunstancias y obligaciones en la temporada.