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8.711 txapeldunes en la Herri Krosa

La Herri Krosa confirma su buenmomento con una participaciónsuperior a las ocho mil personas. David García y Maite Arraizafueron los primeros en cruzar la metaPuedes descargarte aquí las más de 8.000 fotografías de la Herri Krosa

8.711 txapeldunes en la Herri KrosaFotos: Borja Guerrero, O.M, Juan Lazkano, José Sampedro y Oskar González

BILBAO ? Las calles de Bilbao cambiaronsu imagen durante unashoras para vestirse de gala y acogerla fiesta de la Herri Krosa. Loscoches quedaron aparcados en losgarajes y los corredores se hicierondueños de la carretera. Desde laGran Vía hasta Lehendakari Aguirre,pasando por el Ayuntamiento oAutonomía, entre otros lugares. Unescenario idílico para correr paraunos participantes de lujo. Atletascon muchos galones dispuestos abatir las mejores marcas o novatosen la prueba con la intención de vivirel espíritu único de esta carrera. Losretos se pudieron contar a millares,una meta por cada uno de los 8.711 inscritos que decidieron calzarse laszapatillas y formar esta marea blancaque transformó, un año más, lacapital vizcaina. Pero no solo en plenadisputa se vivió la Herri Krosa,desde las aceras, una gran multitudde personas se unieron para animara los participantes, sin importarquién fuera, todos se llevaron sumerecido aplauso que se agrandó cuando rebasaron triunfadores lalínea de meta.

Con el sol resplandeciendo en loalto del cielo, sin rastro de la fina lluviaque cayó en ediciones anterioreso el molesto viento que entorpeciómás de una vez su avance, los corredorespudieron disfrutar de la HerriKrosa en las mejores condicionesposibles. “Aunque a la mañana hizoalgo de frío, luego salió el sol y sepudo correr muy bien”, comentóDavid García, ganador de la prueba.

El atleta durangarra parece haberlecogido la medida al trazado bilbaino,conoce cada uno de los detallesde los diez kilómetros que componensu recorrido y ayer salió dispuestoa batir todos los registros, poniendoun ritmo brutal desde la primerazancada que nadie fue capaz deseguir. García puso en 2012 su primeramuesca y desde entonces nohay nadie que sea capaz de cruzar lalínea de meta por delante de él.

“Estas últimas semanas llevo entrenandomuy bien y tenía la intenciónde probarme. Salí a un ritmo muyalto y, aunque no llevé ni reloj, ibamirando los relojes de la calle, y medi cuenta que si seguía así iba a marcarun tiempazo”, añadió. Por su parte,Maite Arraiza fue la primeramujer en finalizar la prueba: “Comosiempre, ha sido muy bonito. Estábien hacer algo así, con más gente, y sirve para hacer un entrenamientomás ameno”.

García y Arraiza fueron los primerosen cruzar la meta, pero no losúnicos vencedores de la misma. Enla cita bilbaina no importa la posiciónen la que se termina, siempre segana. Desde el primero hasta el último,todos reciben la medalla conmemorativaque les reconoce como losganadores de la Herri Krosa. Nuestroobjetivo es que la gente se lo pasebien y todos se sientan ganadores, daigual que sea el primero o el 8.700”,declaró Iñaki Oria, uno de los organizadoresde la prueba. Los rostrosde satisfacción fueron la nota dominantey cada uno de los casi diez milparticipantes pudo vivir el espírituinigualable de la Herri Krosa. “Estamosmuy contentos porque todo sehaya desarrollado con normalidad ysolo hay que ver la cara de la gente,estamos muy felices”, añadió Oria.

Este año la participación ha bajadoun poco con respecto a la ediciónanterior, aunque esto no preocupa ala organización, que ve cómo lo queempezó siendo una pequeña iniciativa,se ha convertido en un eventoúnico y una cita indispensable dentrodel calendario de carreras popularesde Bizkaia: “Esto es un dientede sierra, pero vamos a más. Despuésde 28 años tener una participaciónde 8.700 personas es un lujo”.