Estados Unidos elige presidente o presidenta. Existen miles de razones para decir que es mejor que Donald Trump no regrese a la Casa Blanca. Pero la historia, que siempre tiene dos caras, también puede contarse sobre por qué es necesario que la próxima inquilina sea Kamala Harris. Una mujer que defiende el mantenimiento de los derechos conquistados para miles de personas como son los migrantes, las propias mujeres y aquellos pertenecientes al colectivo LGTBI+. Espero que esa sea la principal razón de peso para celebrar la victoria de la representante demócrata en próximas horas. Tic, tac.