Esto sí que es un sindiós! Los curas del chat de Toledo -que deseaban la muerte del Papa Francisco- eran unos aprendices de brujo al lado de las monjas clarisas que protagonizan una grotesca performance de obispos falsos, religiosas herejes y excomuniones. ¡Solo les falta un buen milagro! Atrincheradas en Belorado, estas almas descarriadas han llevado a toda hostia su rebelión a Instagram (donde enseñan los dientes hasta las encías) porque allí se deben pagar mejor las penitencias. Son unas hermanas cachondas que salen de la clausura para ir a concursos de alta cocina como Madrid Fusion, que se vinculan a una secta relacionada con el Palmar de Troya y se ven envueltas en operaciones inmobiliarias especulativas. Oficia la peculiar liturgia sor Isabel de la Trinidad, madre abadesa. En el papel de actriz principal, Sor Sión, y el guión del culebrón lo escribe Pablo de Rojas, duque imperial, príncipe elector del Sacro Imperio Romano Germánico, y grande de España que, con tanta cofia y tanto siervo, ya ha dejado claro que su reino no es de este mundo. La producción de la obra de arte sacro corre a cargo de un afamado coctelero, travestido de cura, y para más inri, portavoz del affaire. ¡Qué trabajos nos manda el Señor! Y mientras ellas practican el ora et labora, el obrador, donde elaboran deliciosos chocolates artesanales, con fumata negra. A saber qué meterán en las trufas.