OS tipos (tanto monta) de la spanish jet-set, por familia aristocrática uno, por amistades otro; salpicados ambos por escándalos previos, el de corrupción de menores del duque de Feria, su padre, el primero; el de la corrupción a secas de la red Púnica del PP, el segundo; Medina y Luceño de apellidos, hijo y hermano de grande de España uno, supuesto gurú empresarial salido de altas escuelas de dirección otro; se hacen contratistas del Ayuntamiento madrileño y, según los responsables municipales, lo estafan... Dos tipos (monta tanto) de la élite del deporte español, campeón del mundo uno, presidente de federación otro; millonario por contrato y exitoso empresario por contactos el primero, en camino de serlo por incremento de sueldo y relaciones el segundo; hacen un pingüe negocio para el fútbol y para ambos, Piqué y Rubiales, con la Supercopa en Arabia Saudí... Y hasta hablan de involucrar a Juan Carlos I (tantas montó), ex jefe de Estado y emérito rey de desvergüenzas varias, incluida la de las presiones a su examante Corinna por el CNI que hasta 2019 dirigía Félix Sanz Roldán... El mismo CNI al que se señala ahora por el espionaje vía Pegasus, de 2017 a 2020, también con Sanz Roldán (montó tantas) en la dirección, a 63 soberanistas catalanes y vascos. "Es mi conclusión bien fundada que, como ex gran nación, padecemos de corrupción corporativa a todos los niveles" puso en boca de Hector Meredith, agente del MI6 británico, John Le Carrè en Un traidor como los nuestros. Tanto monta...