N un primer golpe de vista, el que permite la visualización de una web en el móvil, creí ver el pasado lunes al presidente de los jueces, Carlos Lesmes, colocándole bien el chaqué al rey Felipe en una imagen de El Periódico de Cataluña. Si se amplía la foto se distingue que Lesmes señala con la mano algo. El monarca fija su mirada en ese punto con atención y gesto serio mientras tira de las dos solapas de su levita. Pero en el formato casi microscópico de la portada miscelánea de la web móvil daba la impresión de que el juez agarraba la vestimenta a la altura del brazo para ajustarla y el rey hacía lo propio por delante. Nunca debí agrandar la foto, porque en el vistazo inicial parecía casi poética. El jefe de los jueces preocupándose por la imagen del rey justo en el momento en que la Justicia estrecha el cerco en torno a su padre. "No se preocupe, alteza, a ver si estos de la fiscalía encuentran algo que no podamos meter en la lavadora/prescriptora, pero puede estar seguro que la institución que usted representa está por encima de todo", le diría mientras juntos ponen el regio chaqué en orden. Poco después, Lesmes pidió "generosidad" y "patriotismo" al PSOE y al PP para renovar el Poder Judicial, como un padre que le pide a su hijo que deje de molestar cuando está viendo el telediario. Y me temo que con el mismo efecto, porque ambos partidos solo están preocupados en hacer ruido para ganar votos. Algo que por cierto garantiza el blindaje de la corona.

Asier Diez Mon