Centro de las conversaciones y, sobre todo, las miradas de la Nochevieja y el Año Nuevo desde hace ya casi una década: Aunque solo una vez y no por elección mía se ha sintonizado su cadena en mi casa para ver las campanadas, debo reconocer que ha dado con la fórmula del éxito. No solo ha conseguido que se hable de usted y de su vestido (si es que se le puede llamar así a una pieza que muestra más de lo que cubre) durante los días previos y posteriores a la emisión. Como vimos anteayer, ha conseguido que hasta en la televisión pública traten de copiar la receta que incluye una presentadora con un atuendo explosivo.

Y, de propina, se anota el tanto de que su semidesnudo pase por la releche en verso de las causas solidarias. El año pasado fue “por los refugiados” y este, “para concienciar sobre el agua”. Mucho mérito.