Fobia a las fobias
A vueltas con las polémicas del autobús de Hazte Oír y la puesta en escena de Canarias, me planteo unas cuantas preguntas: ¿Es transfóbico dicho autobús? Entiendo que las personas transexuales puedan sentirse humilladas u ofendidas, por tanto no está bien. Y el Carnaval de Canarias, ¿es cristianofóbica dicha parodia de la fe de muchas y muchos en el mundo? Creo que sí, que está hecha con el objetivo de ofender, de reírse de lo más sagrado para los cristianos.
Durante años las personas homosexuales se vieron forzadas a ocultarse por miedo al rechazo y desprecio de los demás. Afortunadamente, esos tabúes han desaparecido de nuestra sociedad. Ahora, sorprendentemente, algunas de esas personas que sufrieron ese rechazo son los líderes de las burlas y ridiculizaciones de la fe católica y de sus miembros. Es triste, pero me niego a creer que representan a todos los homosexuales de este país.
Creo que en una democracia todo tipo de fobias han de ser combatidas con las armas de la palabra y de unas leyes razonables. La libertad de expresión ha de ser la misma para todos, sin importar sus creencias y con el límite que el respeto a la libertad del otro impone. Debemos luchar por una democracia “ofensofóbica” en la que florezcan las filias: la “respetofilia”, la “educafilia”, la”libertafilia”. Así avanzaremos juntos y unidos aun en la diversidad.