Recién finalizadas las obras de canalización del río Gobelas, en el tramo que discurre desde la carretera de La Avanzada hasta el polideportivo de Romo, de un tiempo a esta parte han surgido unos malos olores para los que los vecinos de las calles Errekagane y Villa de Plentzia no encontramos explicación. Lo cierto es que permanecer en el cruce de ambas calles se antoja como tarea imposible, o al menos reservada para titanes, ya que el hedor es prácticamente insoportable. Esperemos una rápida solución