La gran recogida de cable

El cierre de Telegram me hacía una faena, pero no me ha preocupado mucho el anuncio: sabía que era imposible. Lo sabíamos todas y todos los que hemos convertido Internet en nuestro lugar de trabajo. No lo sabía, está claro, Santiago Pedraz. Para que nos hagamos una idea, es como si un juez cierra todos los comercios de Bizkaia porque la o el dueño de uno ha cometido un delito fiscal. El error de Pedraz, no obstante, creo que pone otra vez sobre la mesa dos viejas cuestiones sin resolver: por un lado, las decisiones judiciales sobre un medio que no conoce quien debe tomarlas, por otro, la necesaria regulación de Internet.

Cuando el terror cambia de bando

Cuando el terror cambia de bando de manera inesperada las sociedades se estremecen. Acaba de pasar en Rusia, donde Putin sostenía su careta con las gomas de la seguridad interna, que se resquebraja después del terrible asalto a una sala de conciertos y a posteriores desalojos por avisos de bomba, como muestra Ricardo Marquina en X. Reconozco que en algunas ocasiones he tenido la tentación de desear que quienes han ejercido o tolerado el terror contra otras personas lo sufran en sus carnes. Empezando por nuestro entorno. Pero si algo nos puede diferenciar de las malas personas debemos aprovecharlo.

¿Por qué?

Como empresa privada que es, Aek puede atribuirse los valores que le dé la gana. Lo saben de maravilla, por eso organizan la Korrika y por eso buscan, con acierto, la colaboración institucional plena, empezando por los partidos políticos y terminando por EITB. Lo que no entiendo es que después de demostrar que lo saben, no tengan problema en exponerse a una denuncia pública de Covite por la exhibición de imágenes de miembros de ETA durante la carrera. Y a estas alturas a mí por lo menos no me vale eso de recurrir a las expresiones populares espontáneas cuando han demostrado control pleno de la situación.

Sumar ya es un partido

Al final, sí, Sumar se ha convertido en un partido político. Lo hizo el sábado pasado con baja participación de las bases, según Público, y menos ruido, según cualquiera que siga la actualidad política. Yolanda Díaz, por lo tanto, se desdice y convierte su marca en una organización tradicional aunque aseguraba que ese era un modelo obsoleto. Y dan el paso en el peor momento para Sumar, esto, también, es innegable: peores resultados de los esperados en España, muy malos en Galiza, y expectativas muy frías para Euskadi y Catalunya. Parece que, definitivamente, el viaje de ese espacio político llega a su fin, que era el punto de partida.

Bielsa tenía razón

Pase lo que pase, es fácil que acabe dándole la razón a Bielsa, aunque creo que se equivocó sin duda cuando no salió a hacer declaraciones después del Euskadi-Uruguay. Con todo, insisto, creo que nuestro loco más cuerdo acierta al enfadarse ante el carrusel de cambios de Jagoba Arrasate, y que las y los aficionados de la selección de Euskadi deberíamos de hacer lo mismo: si jugamos en fecha FIFA deberíamos de hacerlo con las normas estándar de la FIFA. Sé que en este tipo de reclamaciones me quedo solo, como cuando digo que me gustaría ver al equipo femenino del Athletic en mi localidad y usando mi carné de socio con normalidad.