ALE, que errar es humano y rectificar, de sabios. Que uno tiene derecho a equivocarse si lo hace de buena fe. Pero que, el día que decae el estado de alarma, sin haber movido un dedo para habilitar un marco legal alternativo, pierda los cuartos traseros el ministro de Justicia para afirmar que se reformará la ley si las autonomías no tienen margen para restringir, para desdecirse luego, es una burla. Todos sabían que las medidas anticovid caerían por el sumidero del debate jurídico. Apelamos a la responsabilidad ciudadana para suplir la que no ha mostrado Sánchez.