RIMERO fueron 73 militares en la reserva, que en una carta a Felipe VI cargaban contra el gobierno “social-comunista” apoyado por “filoetarras e independentistas”. Luego, el chat en el que soldaditos anhelaban fusilar a 26 millones de personas. Ahora, otros 271 militares -ellos mismos afirman que siguen siéndolo- atacan al Gobierno y se duelen de la frágil unidad de España, que, avisan, juraron garantizar “en-tregando la vida si fuera preciso”. Si esto no es una rebelión -¿o será sedición?-, que venga el juez Marchena y lo vea. ¡Ah! Feliz día de la Constitución.