AL menos cinco días y seis muertos después, el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, sobrevoló ayer las zonas más afectadas por la gota fría en el Levante. Sobrevolar tiene aquí un componente intencionadamente metafórico. Sánchez cogió el helicóptero y desde las nubes contempló el desolador panorama. Vamos, nada distinto de lo que viene haciendo en el día a día: sobrevolar los problemas, los asuntos, los temas, las negociaciones, los compromisos. Ayer, cuando bajó a tierra, dijo a los vecinos: “Vamos a estar aquí”. Esto es lo que hay.