¡Señoras y señores se ha abierto la veda! ¡¡A ver quién la dice más gorda!! La veda electoral es el lapso de tiempo durante el cual rigen una serie de prohibiciones legales vinculadas a la propaganda política, que solo se aplican cuando hay elecciones. En el caso que nos ocupa podríamos decir sin temor a equivocarnos que estamos ya inmersos en el ring político, donde unos y otros, en su cálculo electoral, se miden y compiten por ver quién la dice más gorda, quién saca mejor los colores al contrincante. Todos y todas pelean por ganar el combate por K.O. y para ello ensayan y ejercitan endiablados movimientos políticos que dejen sin defensa al contrincante: la reforma laboral, de las pensiones, de la seguridad ciudadana, del aborto, reforma fiscal, y un sinfín de reformas, recortes que tumban al púgil en la lona a la vista de sus electores. Aquí en Euskadi, el combate está centrado en la petición de los presos políticos, el desajuste en la conformación de la ejecutiva del PP, el mandato soberano que ejercita el PSOE desde Madrid o la incertidumbre constante de lo que vaya a pronunciar Bildu dentro de la campaña. Sería conveniente sacar del ring político aquellos insultos, ¡y tú más!, y que cada cual demostrase su verdadero entrenamiento, su sacrificio personal, su destreza para salir adelante. También es justo y necesario que los partidos políticos convocasen un ERE político, siendo una oportunidad que conviene aprovechar para renovar sus plantillas. Un buen movimiento de las campañas sería que los oponentes se quitasen los guantes de boxeo y se dieran la mano para debatir con la altura y profundidad que todo país merece. Eso se ha perdido hace ya demasiado tiempo, si alguna vez lo hubo.

Juan Carlos Audikana. Gasteiz