"Los sueldos con los que fueron blindados los consejos de administración han sido inmorales", declaraba el obispo Munilla en la homilía de Loiola. Lo del blindaje lo engarzo con algo a lo que no puedo dar crédito:

Con fecha sábado 16 de junio de 2012, el BOE publica la nueva Ley 10/2012 aprobada por el Parlamento Vasco el 30 de mayo y que servía de reforma a la Ley 7/1981 de 30 de junio, de Gobierno.

En Artículo (38) único, dice:

1) Tendrán derecho a una pensión vitalicia: a) El lehendakari y los consejeros que formaron parte del Gobierno vasco desde octubre de 1936 hasta el 15 de diciembre de 1979. b) Los lehendakaris y los consejeros del extinguido Consejo General Vasco. c) Los lehendakaris de los gobiernos de la Comunidad Autónoma del País Vasco. d) Las viudas o viudos, huérfanos y huérfanos y padres y madres de las personas citadas en los apartados anteriores.

Y 2) Tendrán derecho a percibir pensión vitalicia las personas comprendidas en los apartado a) y b) del número anterior siempre que hubieran llegado a la edad legalmente prevista para ingresar en la situación de jubilación, y las comprendidas en el apartado c) requerirán, además, haber prestado al menos dos años de servicio a la Comunidad Autónoma.

Multiplicado por 18 gobiernos y sumar que tenemos 450.000 políticos para 47 millones de ciudadanos, cuando Alemania para 80 millones tiene 150.000, sin antes adelgazar y refundar el Estado, redistribuyendo de manera mas equitativa bienes y cargas fiscales, hará imposible ganar esa confianza de los países donantes de la UE, para hacernos acreedores de sus ayudas y nos veremos obligados a pedir el rescate integral... que nos convertirá en siervos.