regreso de Madrid: una colaboración, varias reuniones y la gala de los Premios de la Música en la cabeza. Justo antes de llegar a Bilbo me fijo en las laderas del Pagasarri y descubro la frondosidad y el colorido de una primavera en plena efervescencia. Pasados los días decido dar una vuelta por ese rincón.
El monte Pagasarri pertenece al macizo de Ganekogorta que, con sus 1.000 metros de altura, funciona como frontera natural entre los territorios de Bizkaia y Araba. En el trayecto compruebo que el Paga está vivo y rebosa vitalidad convirtiéndose en el pulmón de una ciudad tan frenética como Bilbao. Comentaban en un artículo que esta zona alberga sorprendentemente una rica fauna que, sin duda, revaloriza el entorno con moradores como la culebra de esculapio, el halcón peregrino o el gavilán entre otros. Con un sol de justicia continúo mi caminar entre praderas de un verde intenso y unas vistas cada vez mas privilegiadas pensando en lo difícil que me resulta creer que especies animales tan salvajes puedan habitar un lugar tan cercano a un núcleo urbano tan denso como Bilbao que parece que tendría que haber perdido su valor ecológico, como si la misma se rigiera por patrones humanos.
La naturaleza no se circunscribe solo a lugares lejanos y paradisíacos. Especies animales y vegetales, que ahora nos parecen tesoros ecológicos, hace miles de años no poblaban nuestras tierras ejemplificando que la naturaleza es algo vivo, cambiante, que evoluciona y se desarrolla por parámetros que. hasta diría, desconocemos en gran medida. Antes gavilanes, halcones, etc. eran especies que solo se veían en los libros o visitando rincones muy lejanos y agrestes. Hoy, incluso en entornos tan humanizados como el Pagasarri, podemos disfrutar de ellos.
No nos dejemos llevar siempre por mensajes pesimistas y alarmantes, cierto es que no todo esta bien pero no es menos cierto que se están consiguiendo grandes cosas. Creo que hemos de aprender de los animales, pues solo se dejan llevar por su instinto, por lo que necesitan y lo que son. Y siempre ACIERTAN. Igual un día hasta aprendemos ¿no?