El 21 de septiembre acudí al hospital de Basuto, al pabellón Revilla, en el sótano, para realizar una prueba de endoscopia con sedación. A las 18 horas. Puntualmente, se me llama y un enfermero o auxiliar (bata blanca) me inicia la búsqueda de una vía. El primer intento, en la muñeca izquierda, fallido, y en el segundo, en el brazo derecho, me coloca un catéter más pequeño.
Al pasar donde la prueba, una enfermera (bata azul), con las indicaciones de una doctora (bata verde), empieza a introducir jeringuillas del sedante por la vía. Me encontraba de lado, con el brazo izquierdo casi inmovilizado por mi propio cuerpo, y en el derecho tenía la vía. En la boca se me había colocado un cilindro, por donde luego me iban a introducir el tubo con la cámara.
Desde la primera jeringuilla noto un agudísimo dolor y quemazón, y noto que algo no va bien, pero no puedo hablar, no se me retira el cilindro y ellas prosiguen. La doctora se sorprende de que no esté adormilando, y le indica a la enfermera que aumente la dosis. El dolor proseguía y aumentaba cada vez que apretaba la jeringuilla.
Mientras, todo tipo de comentarios entre ellas. Pasé de ser un "quejica", a venir "medicado", a ser una "drogata", porque llegó a sugerir que me drogaba ya que con tal cantidad de sedación tenía que estar como un tronco.
El dolor era insoportable y como veía que no eran capaces de ver lo evidente, intenté arrancarme el cilindro. Mi grado de nerviosismo era alto, estaba sudando, con un dolor en el brazo muy alto y (para mi entender) con dos incompetentes que seguían en su plan de torturarme. La doctora al ver mi determinación de quitarme el cilindro me ayudó a quitarlo y por fin les pude decir que la vía estaba mal colocada, que el brazo se había hinchado... Por fin se hizo la luz, retiraron la vía, y la enfermera la volvió a introducir en la mano izquierda. No hubo más problemas porque me debí de dormir y realizaron la prueba.
Ahora que son las 9 de la mañana del día siguiente, mientras escribo esto tengo un malestar en la garganta (que lo considero normal por la prueba) y un fortísimo dolor en el brazo derecho. No puedo estirarlo del todo, ni coger ningún tipo de peso. No puedo llevarme la comida a la boca, porque no alcanzo a doblarlo sin que el dolor aumente hasta decir basta....
Esto es una vergüenza. Me tratan de drogadicto, no se disculpa nadie, parece que la culpa de todo la tenía yo por tener "unas malas venas, pequeñas y que se mueven", tengo el brazo que no puedo realizar mi vida normal y estoy preocupado por si me han fastidiado algo por ahí, haciendo fuerza para introducir las jeringuillas cuando la vía estaba mal colocada... ¿Dónde demonios estaba pinchada? ¿En un tendón?
Si realmente se me ha podido fastidiar algo en el brazo, espero que se pongan en contacto conmigo y que el corporativismo no funcione en este caso,