EL mes de enero se ha cerrado en la Comunidad Autónoma Vasca con 7.486 parados más para un total de 135.687, según el Inem, lo que significa que el paro ha crecido en más de veinticinco mil personas durante el último año, con un incremento interanual de más del 23% que, además, es especialmente acusado a partir de junio, acumulando en los últimos meses más de dos terceras partes del aumento del desempleo. Las cifras hablan por sí solas de la gravedad de la situación económica y, sobre todo, de la terrible repercusión que ésta tiene en cada vez más estratos de la sociedad vasca pero, sobre todo, desmienten por enésima vez de forma rotunda aquellos irresponsables anuncios de brotes verdes que tanto desde el Gobierno español que preside José Luis Rodríguez Zapatero como desde el Ejecutivo de Patxi López se empeñaron en publicitar al principio de la segunda mitad del pasado año, así como el más reciente augurio de López que situaba en 2012 el fin de la crisis. Llama además poderosamente la atención que el fuerte incremento del paro haya coincidido precisamente con el periodo para el que Lakua había anunciado la puesta en marcha de un plan que debía dar empleo a siete mil parados y que incluyó dentro del paquete de medidas que denominó +Euskadi 2009, fuertemente criticadas en su día por todos los sindicatos de implantación exclusiva en Euskadi. López llegó a afirmar que el plan, anunciado por primera vez el 7 de setiembre, casi cuatro meses después de haber accedido a la Lehendakaritza y no aprobado por el Gobierno hasta el 24 de noviembre, dos meses y medio más tarde y cuando el aumento del desempleo dibujaba ya una más que preocupante curva ascendente, podría llegar a crear hasta diez mil nuevos empleos que, según afirmó la consejera Gemma Zabaleta, deberían empezar a tener un reflejo positivo en las estadísticas en enero de 2010. De hecho, la dotación económica del plan fue una de las razones esgrimidas para el endeudamiento de 1.050 millones que el Ejecutivo López, pese a las críticas, aprobó para el último ejercicio. Pues bien, muy al contrario, Euskadi alcanzó el mes pasado una creación de desempleo del 5,8% respecto al mes anterior, más de dos puntos por encima del incremento del paro (3,1%) que ha soportado en el mismo periodo el Estado español, en donde el desempleo ha alcanzado su cota récord de los últimos trece años, para alcanzar una cifra de parados que tampoco se conocía en la CAV desde los 150.000 puestos de trabajo perdidos en 1990. Todo esto constata que la acción de gobierno frente al principal problema que afecta a la sociedad vasca se ha mostrado ineficaz además de tardía y urge, por tanto, que el Ejecutivo evite seguir trasladando a Euskadi la política de subvención temporal del empleo puesta en práctica por Madrid para desarrollar políticas estructurales que permitan corregir una deriva ya más preocupante.