El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha confirmado este martes un principio de acuerdo de alto el fuego de 60 días para el cese de las hostilidades entre el Ejército israelí y el partido-milicia chií libanés Hizbulá, que desde hace más de un año intercambian ataques de un lado y otro de la frontera en el marco de la guerra en Oriente Próximo.
Netanyahu citó tres razones para promover el alto el fuego en este momento. La primera razón que presentó fue la amenaza iraní, sin dar más detalles. Otra razón que mencionó es la necesidad de reponer las tropas de las Fuerzas Armadas de Israel (FDI) y reponer las existencias de armamento. Este retraso se solucionará pronto”, afirmó Netanyahu. La tercera razón que mencionó el primer ministro israelí es la necesidad de “cortar los estadios y aislar a Hamás”. Según él, “cuando Hizbulá queda fuera de escena, Hamás se queda solo en la campaña. Nuestra presión sobre él aumentará”.
Así lo ha confirmado el mandatario israelí en un discurso a la nación, poniendo punto y final a las especulaciones de los últimos días en torno a un posible acuerdo. Antes, Netanyahu había reunido su gabinete de seguridad, y algunos de sus ministros más destacados habían mantenido conversaciones al más alto nivel sobre este mismo asunto.
Los ataques del Ejército israelí contra territorio libanés dejan hasta la fecha más de 3.700 muertos y unos 15.700 heridos, según el último balance del Ministerio de Salud Pública de Líbano. Entre los fallecidos se encuentra parte de la cúpula de Hizbulá, incluido el que durante décadas fuera líder de la organización islamista, Hasán Nasralá.
Sin embargo, Israel intensificó este martes los bombardeos contra la capital de Beirut, mientras el alto mando militar se reunió para aprobar la continuación de las operaciones ofensivas en el norte, en la víspera de un posible acuerdo de cese al fuego con Líbano.
Veinte objetivos en Beirut en dos minutos
Según el Ejército, Israel atacó 20 objetivos en Beirut en solo dos minutos, utilizando ocho aviones de combate. "Entre los blancos se encontraban siete objetivos relacionados con la gestión y almacenamiento de dinero de Hizbulá, incluidos cuarteles generales, almacenes de dinero y sucursales del banco Qard al Hasán", informó un comunicado castrense.
Al menos una persona murió en los ataques contra un edificio cercano a una mezquita en el centro de Beirut, según fuentes libanesas, en medio de las altas expectativas del anuncio de un inminente alto al fuego que comenzará a partir de las 9.00 horas (8.00 horas GMT) de este miércoles.
Minutos después, aviones israelíes lanzaron una nueva serie de bombardeos a gran escala sobre varios puntos de los suburbios sur de Beirut, precedidos por una veintena de órdenes de evacuación.
Según la Agencia Nacional de Noticias Libanesa (ANNL), los bombardeos cercaron los barrios de Burj al Barajneh, Haret Hreik y Al Hadath, mientras una barrera de "humo cubría gran parte de la atmósfera del (suburbio de) Dahye hasta Beirut".
El Ejército israelí también informó que continúa su invasión terrestre en el sur del Líbano, iniciada el pasado 1 de octubre, contra comandos de Hizbulá que dice han continúan atacando el norte de Israel.
Por otro lado, el alto mando militar, liderado por el ministro de Defensa Israel Katz junto al jefe del Estado Mayor del Ejército, Herzi Halevi, se reunió este martes para confirmar la continuidad de las operaciones ofensivas en el frente norte.