El Gobierno en funciones de Haití, liderado por el primer ministro Ariel Henry, anunció ayer pasos para una “rápida” transferencia de poder al Consejo Presidencial de Transición, creado hace más de dos semanas con el objetivo de restablecer el orden constitucional ante el drástico deterioro de la seguridad en el país caribeño.

Los miembros del Gobierno se han centrado en “la mejor manera de crear el Consejo Presidencial de Transición y designar a sus representantes”, tras lo cual el texto ha sido enviado a juristas para “ajustarlo” a las leyes del país, según un comunicado publicado en la página web del Ministerio de Comunicación haitiano.

Este texto indica que en la víspera Henry recibió del mandatario guyanés y presidente de turno de la Comunidad del Caribe (Caricom), Irfaan Alí, que actúa como facilitador en el proceso, un proyecto de decreto que establece la organización y funcionamiento del organismo temporal.

El Consejo de Ministros pedirá a la Caricom el acuerdo político firmado entre las partes del organismo: “A falta de poder referirse a la Constitución y las leyes, el citado acuerdo servirá de referencia para la redacción del decreto”, han indicado, después de mencionar que “tropezaron con cuestiones jurídicas” debido a que “las leyes haitianas no prevén esta institución”.

Asimismo, indicó que desea la creación de una comisión mixta entre partidos salientes y entrantes, que incluya juristas, y que tenga el fin de garantizar el cumplimiento de la Constitución, así como el favorecimiento de un traspaso pacífico y rápido de las responsabilidades.

Ataques en el centro de la capital

La declaración del Consejo de Ministros llegó mientras se registraban ráfagas de disparos en varios lugares de la capital, Puerto Príncipe, en particular en Chams de Mars, en las proximidades del Palacio Nacional y de ministerios (como el de Comercio o el de Economía) y embajadas (como la de Francia o el Consulado de Estados Unidos).

Estos disturbios, que también afectaron a las carreteras del Aeropuerto Internacional de Puerto Príncipe, han perturbado las actividades comerciales de la zona, según informó la agencia de noticias haitiana Alterpresse.

La Oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas avisó de una “cataclísmica” situación en el país a raíz de la “grave” crisis de inseguridad, que ha dejado a las autoridades “al borde del colapso”. El informe documenta un aumento del número de víctimas debido a la violencia de las pandillas en 2023: un total de 4.451 muertos y 1.668 heridos. Además, solo en los tres primeros meses de 2024 se han registrado 1.554 muertes y 826 heridos.

Huida de la población

La escalada de la violencia en la que vive sumida Puerto Príncipe llevó a que más de 50.000 personas hayan abandonado en las últimas tres semanas la capital de Haití, según un recuento de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), que atribuye a la inseguridad el 83% de estos desplazamientos. En concreto, la agencia de la ONU tiene constancia de 53.125 desplazados entre el 8 y el 27 de marzo. Se trata de personas que buscan una mínima seguridad en otras zonas de Haití, un país que vive sumido en el caos político y social y que arrastra una grave crisis humanitaria.

El 68% de quienes huyen de Puerto Príncipe ya habían tenido previamente que abandonar sus hogares en la capital y el 59% confiesa que se quedará en otras provincias el tiempo que sea necesario, sin anticipar por tanto una fecha de vuelta.

La OIM recoge en su informe que seis de cada diez de las personas huídas de la región metropolitana de Puerto Príncipe han recalado en el departamento sur, donde ya hay más de 116.000 desplazados. El 96% tiene claro en cualquier caso que no saldrá de Haití, si bien un 3% aspira a cruzar a República Dominicana.

La organización ha enfatizado que “las provincias (haitianas) no tienen suficientes infraestructuras y las comunidades de acogida no tienen suficientes recursos” para responder al flujo “masivo” de las últimas semanas, en previsión de que éste siga también aumentando a corto plazo.

El apunte

Blinken. El secretario del Departamento de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, trasladó su apoyo al presidente de turno de la Comunidad del Caribe (Caricom), Irfaan Alí por sus esfuerzos para promocionar una gobernanza “inclusiva” y “representativa” en Haití mediante la creación de un Consejo Presidencial de Transición.

“(Blinken) ha reiterado que Estados Unidos valora el apoyo de Caricom a los esfuerzos de Haití para promover una gobernanza inclusiva y representativa”, según el Departamento de Estado.