Un palestino murió y al menos siete resultaron heridos este jueves por fuego de las fuerzas de Israel durante violentos enfrentamientos que estallaron en varios puntos de Cisjordania ocupada a raíz de una redada del Ejército israelí que dejó nueve palestinos muertos por la mañana.

"El joven Youssef Yahya Abdul Karim Muhaisen, de 22 años, murió a causa de sus graves heridas en el Complejo Médico Palestino de Ramala, como consecuencia de los disparos de la ocupación (israelí) en Al-Ram", un poblado entre Jerusalén y Ramala, indica un comunicado del Ministerio de Sanidad de la Autoridad Nacional Palestina (ANP).

Cisjordania ocupada vivió desde temprano uno de sus días más mortíferos en años después de que fuerzas israelíes mataran a nueve palestinos durante una redada en la ciudad de Yenín, bastión de milicias de la resistencia palestinas.

La ANP calificó los hechos de "masacre", declaró tres días de luto nacional por los muertos y se convocó una huelga general.

Al mismo tiempo, estallaban enfrentamientos entre los palestinos y las fuerzas de Israel en varias latitudes de Cisjordania en protesta por los sucesos en Yenín.

 Cuatro palestinos resultaron heridos tras recibir disparos israelíes durante enfrentamientos en Al Bireh, al norte de Ramala, y fueron trasladados al Complejo Médico de Ramala.

Uno de ellos recibió un disparo en el pecho y su estado es grave, mientras que los otros tres recibieron disparos en varias partes del cuerpo, según las autoridades sanitarias palestinas.

En tanto, estudiantes de la Universidad de Birzeit, a las afueras de Ramala, marcharon hacia el puesto de control militar israelí de Beit Eil, donde estallaron enfrentamientos, durante los cuales los soldados israelíes dispararon bombas de sonido y de gas lacrimógeno, según la agencia oficial de noticias palestina, WAFA.

Y en Azzun, al este de la ciudad cisjordana de Qalqilya, dos palestinos resultaron heridos tras recibir disparos israelíes, añadió la misma fuente, que reportó que decenas de personas sufrieron asfixia por bombas de gas lacrimógeno lanzadas por los soldados.

Otro palestino resultó herido por balas reales en el pie durante enfrentamientos en la ciudad de Jericó, cerca del Mar Muerto, según la Media Luna Roja.

Este pico de violencia ha preocupado a la comunidad internacional, con peticiones a la calma tras lo ocurrido de la Liga Árabe, la Unión Europea o la ONU. El enviado de la ONU para Oriente Medio, Tor Wennesland, se mostró "profundamente alarmado y entristecido por el continuo ciclo de violencia en Cisjordania" y expresó su compromiso "para aplacar tensiones, restaurar la calma y evitar más conflictos".

El año pasado, 170 palestinos -parte de ellos milicianos, pero también civiles desarmados- murieron en Cisjordania en incidentes con Israel, el año más violento en la zona desde 2006, tras el fin de la Segunda Intifada. En lo que va de 2023, con las 10 de hoy, ya son 30 las víctimas mortales en Cisjordania, un promedio de más de una por día.