El accidente aéreo registrado hoy en Nepal al estrellarse un aparato con 72 personas a bordo y al menos 68 muertos localizados, es el más grave ocurrido en la zona durante los diez últimos años.

Hasta la fecha el suceso más trágico tuvo lugar el 12 de marzo de 2018 cuando un avión de la aerolínea bangladesí US-Bangla, procedente de Dacca, se estrelló durante la maniobra de aterrizaje en el aeropuerto internacional de Katmandú con 67 pasajeros y cuatro tripulantes a bordo, dejando medio centenar de fallecidos.

Falta de controles

Los accidentes aéreos son frecuentes en Nepal, que ha sido objeto de reiteradas sanciones internacionales por la falta de controles.

La Unión Europea, de hecho, tiene vetado el acceso a su territorio a las aerolíneas nepalíes desde 2013.

Accidentes previos

Quince personas fallecieron también, el 14 de mayo de 2012, y seis resultaron heridas tras estrellarse un avión de la compañía Agni Air, en las montañas del norte de Nepal, después de sufrir un problema técnico. En la aeronave viajaban 16 pasajeros de nacionalidad india que se dirigían a Muktinath, un centro de peregrinación para fieles del budismo y el hinduismo.

Ese mismo año, el 28 de septiembre, 19 personas -siete británicos, cinco chinos y siete nepalíes- murieron asimismo al incendiarse un avión Dornier, de Sita Air, tras chocar un pájaro contra el aparato poco después de despegar del aeropuerto de Katmandú.

El 16 febrero de 2014 murieron los 18 ocupantes de un avión Twin Otter al estrellarse la aeronave, que había partido de Pokhara con destino Jumla. La escasa visibilidad a causa de la nieve fue la posible causa del siniestro.

Dos años después, el 24 de febrero de 2016, un Twin Otter de la compañía nepalí Tara Air se estrelló igualmente cuando realizaba desde el aeropuerto de Pokhara al de Jomsom, una ruta de sólo 20 minutos en la que se sobrevuela el Himalaya. Fallecieron sus 23 ocupantes.

El 29 de mayo de 2022 se estrelló un avión Twin Otter que realizaba el mismo trayecto y fallecieron sus 22 ocupantes.

El más grave

El accidente más grave sin embargo registrado en la zona desde 1990 tuvo lugar el 28 de septiembre de 1992, cuando un Airbus-300 de la compañía Pakistan International Airlines (PIA) se estrelló durante las maniobras de aproximación al aeropuerto de Katmandú y perecieron 167 personas, entre ellas treinta españoles.

Dos meses antes, el 31 de julio, murieron las 113 personas que iban a bordo de un Airbus A310-300 de la compañía tailandesa Thai Airways tras estrellarse el aparato cuando iba a aterrizar en el aeropuerto de Katmandú.