El primer ministro irlandés, Micheál Martin, advirtió este viernes de que el Reino Unido va "demasiado lejos" con su plan para actuar de "manera unilateral" sobre el Protocolo del Brexit para Irlanda del Norte.

Martin efectuó esas declaraciones antes de reunirse hoy en Belfast con los partidos norirlandeses para analizar la formación de un Gobierno de poder compartido, bloqueado desde las recientes elecciones autonómicas por la cuestión del protocolo.

El líder irlandés también mantendrá encuentros con líderes empresariales para escuchar sus preocupaciones respecto a la aplicación de ese mecanismo, diseñado por Londres y Bruselas para gestionar el comercio entre los dos bloques tras el Brexit.

Martin recordó que el Reino Unido y la Unión Europea (UE) mantienen conversaciones "serias y profesionales" para resolver las dificultades que está causando el protocolo en Irlanda del Norte, el "único" marco posible para abordar esta cuestión, subrayó.

El Ejecutivo de Boris Johnson quiere tramitar ahora un proyecto de ley que introduciría un sistema alternativo al que contempla dicho mecanismo, lo que tendría el efecto de anular unilateralmente parte de lo acordado con Bruselas.

"He hablado con Johnson y quiero ser categórico, esta idea de que, de alguna manera, la Unión Europea está siendo inflexible no es cierta, no tiene sentido", declaró hoy Martin a la cadena de radio BBC Ulster.

En su opinión, Londres, a través de este "unilateralismo", manda un mensaje de que las negociaciones deben transcurrir "en sus términos o de ninguna manera", pero ese no es el camino, "sobre todo cuando ha firmado un acuerdo del que ahora reniega".

Martin reiteró que esta posición va en contra "del espíritu de cooperación" del Acuerdo de paz del Viernes Santo (1998), el texto que puso fin al conflicto en Irlanda del Norte y permitió la formación de un Gobierno de poder compartido entre unionistas y nacionalistas.

El primer ministro se reunirá hoy en Belfast con los líderes norirlandeses, entre ellos Michelle O'Neill, líder del Sinn Féin, ganador de las elecciones del 5 de mayo por delante del Partido Democrático Unionista (DUP), que rechaza entrar en el nuevo Ejecutivo hasta que Londres y Bruselas acuerden cambios en el protocolo.

Los unionistas sostienen que este mecanismo ha creado demasiadas fricciones económicas y políticas en la región y ponen en peligro su relación con el resto del Reino Unido, más aún cuando los nacionalistas quieren impulsar su objetivo histórico de reunificar Irlanda a través de un referéndum.