México. Una de las primeras mujeres mexicanas en convertirse en jefa de Policía, Hermila García, de 38 años, fue asesinada ayer a tiros por un grupo de sicarios cuando se dirigía a su trabajo en el municipio del norteño Estado de Chihuahua, fronterizo con Estados Unidos, informaron fuentes de la Fiscalía estatal.

El pasado 10 octubre, García había asumido el cargo de directora de Seguridad Pública del municipio de Meoqui, a 70 kilómetros de la capital del Estado, y dirigía una corporación integrada por 90 agentes. La Fiscalía de Chihuahua precisó que la jefa de Policía asesinada en este Estado murió en su automóvil a unos 10 kilómetros del centro de Meoqui, cerca de su domicilio. Hermila García había sido años atrás agente del ministerio público federal (fiscal) de la ciudad de Delicias, en el mismo Estado.

Además de la funcionaria asesinada ayer, en Chihuahua hay otras tres mujeres jefas de policías: Verónica Ríos Ontiveros, en el poblado de El Vergel; Olga Herrera Castillo, en Villa Luz, y Marisol Vallés, en Praxedis G. Guerrero, los tres cercanos a Ciudad Juárez. Marisol Vallés y Hermilia García asumieron sus funciones el mismo día, convirtiéndose en las primeras mujeres en asumir el reto. Sin embargo, el caso de Vallés saltó a la prensa internacional por su juventud, 20 años, y por la cercanía de su municipio con Ciudad Juárez, donde este año ya se han registrado más de 2.700 asesinatos.