EL CLA pasa por boxes para modernizar su apariencia y sus contenidos. Mercedes-Benz aplica el bisturí con delicadeza para preservar la vigencia de un diseño que constituye la carta de presentación y el factor diferencial de este modelo. Además de refinar facciones y contorno, el sedán con alma de cupé y su declinación familiar Shooting Break incorporan significativas innovaciones técnicas y algunas mejoras de equipamiento. En la renovación destaca la completa electrificación de los propulsores a gasolina, ahora dotados de hibridación ligera a 48 voltios; van acompañados por un híbrido enchufable y tres diésel. A punto de asomar al mercado, la actualización del CLA aún no tiene precio; hasta ahora, su tarifa oficial arrancaba por debajo de los 35.000 euros.

El futuro del automóvil pasa por la fusión y el mestizaje. La realidad evidencia esta tesis, y la fórmula gana adeptos día a día: los fabricantes tienden a unir fuerzas en grandes consorcios y la viabilidad de la transición energética requiere hibridar tecnologías. La cultura de la mezcla también alcanza desde siempre al diseño –los SUV de moda son el resultado de cruzar turismos y todoterrenos–, que a veces sorprende con creaciones insólitas y conmovedoras. Es el caso del CLA, sugestivo resultado del desafío de pasar una berlina, y su derivado familiar, por el filtro del estilo cupé.

Mercedes-Benz inscribe a ambos en el segmento compacto, por estar derivados del Clase A. Sin embargo, el CLA Coupé y su derivada Shooting Brake apuntan claramente a una categoría superior, tanto por eslora (casi 4,7 metros) como por empaque. La revisión del proyecto tres años después de su estreno depara sutiles modificaciones formales, que no hacen sino realzar el porte distinguido y elegantemente deportivo del modelo.

Los cambios conciernen al faldón delantero, a la parrilla (con estrella incorporada) y al difusor trasero. Los faros led High Performance, incorporados al equipo de serie junto a los pilotos traseros led, confieren una identidad lumínica reconocible a distancia. La paleta cromática aumenta el número de tonalidades sumando dos pinturas exclusivas. También hay tres diseños más de llantas de aleación, en tamaños de hasta 19 pulgadas; CLA Coupé y CLA Shooting Brake salen de fábrica con las de 17 pulgadas, de cinco radios en color plata vanadio o de cinco radios dobles en negro con acabado de brillo intenso. La nueva entrega incrementa significativamente el equipamiento básico. Incluye ahora el asistente para la luz de carretera, la cámara de marcha atrás y el paquete USB, además del volante de cuero y los mencionados faros delanteros led. Los ejemplares con acabado medio Progressive o superior, instalan también los paquetes de aparcamiento y retrovisores; el envase familiar suma, asimismo, el portón trasero automatizado.

Otra innovación importante es el MBUX de última generación. Este sistema de gestión, información y entretenimiento agrega nuevos estilos de pantalla; propone tres modos de utilización (Navegación, Asistencia y Servicio) y siete opciones de color. Permite personalizar el aspecto del cuadro de instrumentos y de la pantalla central; esta integra todas las funciones de navegación, medios, teléfono con conexión inalámbrica, gestión del vehículo, etc. Ahora se maneja de forma más cómoda e intuitiva, bien por voz o bien por medio de un pequeño panel táctil ubicado ante la consola apoyabrazos central.

El CLA también progresa en materia de seguridad. El paquete de ayuda a la conducción cuenta con asistente de mantenimiento de carril, gestionado mediante el control activo de la dirección. El paquete de aparcamiento asume esta maniobra en sentido longitudinal y, asistido por cámara con imágenes 3D, ofrece una vista panorámica de 360 grados a la hora de estacionar.