La reina Letizia, como su marido Felipe VI, ha tenido trabajo este miércoles. Con motivo del Día de la Fiesta Nacional, han ofrecido una recepción en el Palacio Real en la que han saludado uno por uno a los 2.500 invitados, lo que ha obligado a la asturiana a aguantar de pie, durante hora y media, con sus zapatos de tacón alto. Eso sí, con tres descansos de por medio para poder resistir.

Porque la reina usa esos tacones pese a que le han diagnosticado un neuroma de Morton en el pie izquierdo. ¿Qué es exactamente esa dolencia? Es el engrosamiento del tejido que rodea un nervio de los dedos de los pies, que habitualmente se presenta entre el tercer y el cuarto metatarsiano y que causa un fuerte dolor en la planta del pie.

Y esa dolencia puede ser consecuencia precisamente de llevar esos tacones. Por ello los médicos le han aconsejado prescindir de ellos en el día a día, pero Letizia se ha negado y tampoco ha querido pasar por quirófano.

Felipe VI y la reina Letizia, en el Palacio Real en la recepción ofrecida este miércoles. Chema Moya

No es el único problema que tiene la reina en los pies, ya que desde hace años sufre una metatarsalgia crónica: una opresión de los nervios que se ubican entre los huesos metatarsianos que provoca dolor al apoyar esa zona del pie y al caminar. Para mitigar esos dolores, Letizia suele llevar una plataforma en la parte delantera de los zapatos.