POCOS restaurantes tienen el honor de ubicarse en un edificio catalogado como Patrimonio Histórico. Es el caso del Castillo de Arteaga, situado en una torre neogótica de finales del siglo XVIII – principios del XIX que perteneció a Napoleón III y Eugenia de Montijo. Allí une a los placeres de la buena mesa el capricho de sentirse como en un cuento de hadas. Un aspecto muy apreciado, por ejemplo, para bodas, que según el número de comensales y la época del año se celebran en exclusiva.

En sus mesas impera la tradición con un toque de autor que les distingue. Y en sus elaboraciones priman la calidad al igual que el producto de temporada y de la zona. Así, los pescados salvajes provienen de los puertos más cercanos, como Ondarroa y Lekeitio, y el chipirón, de Elantxobe.

Una de sus especialidades

Entre sus especialidades cabe mencionar el canelón de pato trufado, foie, boniato y yuca o el pulpo asado en la brasa, vegetales, patata espumosa y pimentón de la Vera, al igual que los pescados a la brasa. El carbón de encina da un sabor único a las carnes y pescados a la brasa.

Para comer o cenar, además de la carta ofrecen el menú degustación Mª Eugenia con sus tres variantes, y menús concertados. Si bien recomiendan reservar con antelación.

Todo ello se puede armonizar con sus 176 referencias en bodega, muchas de renombre, a las que se suma alguna más fuera de carta.

En cuanto a comedores, cuenta con tres espacios diferentes, dependiendo del numero de comensales y del tipo de evento. Asimismo, brinda un comedor y carpa exterior en los jardines con una capacidad de hasta 300 pax.

En sus instalaciones dispone de parking propio gratuito con acceso privado y jardines exclusivos para clientes.

Castillo de Arteaga

Gaztelubide 7,

Gautegiz Arteaga.

Bizkaia.

Tfno.: 946 24 00 12