Koldo Zabala, presidente del Gernika: “Está en nuestras manos poder salvarnos”

Ganar sí o sí. Es la única consigna que anida en el entorno del Gernika, que se juega el próximo domingo a una sola carta su permanencia en Segunda RFEF, por lo que Urbieta debe ser una caldera en el deseo de dar el último empujón al conjunto dirigido por Gorka Iraizoz, que necesita superar a la Real Sociedad C, equipo ya descendido a Tercera RFEF, para sellar la permanencia sin fijarse en los resultados de otros rivales implicados, como el Anguiano, Calahorra, Barbastro y Tudelano, de los que sí deberá estar atentos en caso de no sumar los tres puntos frente al segundo filial realista. Este supuesto último que no maneja la entidad foral, tal como declara Koldo Zabala, su presidente. “Hemos llegado vivos al último partido y está en nuestras manos el poder salvarnos, ya que si ganamos, no dependemos de nadie. Luego está en manos de los futbolistas y del cuerpo técnico. Llegar así a la última jornada no está mal”, considera Zabala, consciente de que la villa se volcará el domingo para que se haga realidad el objetivo y dar carpetazo a una temporada que se ha complicado más de lo previsto.

El propio Zabala reconoce que el recorrido de su equipo no ha sido el esperado. “Las expectativas que teníamos a principio de temporada no se han cumplido, ya que el objetivo mínimo era pelear por acercarnos a lograr un plaza para la próxima edición de la Copa (competición en la que el Gernika tomó las tres temporadas anteriores) y optar a los puestos de arriba”, agrega el dirigente del club vizcaino, que pone el acento en la importancia de continuar un curso más en una categoría en la que forma parte desde que se activara en la campaña 2021-22. “No ha podido ser, hemos tenido un montón de lesionados, de larga duración en algún caso. El reto es seguir en Segunda RFEF, que hay que valorarlo porque cada vez esta categoría gana en exigencia. Está en nuestras manos, hay que ganar sí o sí y olvidarnos de los resultados de los demás”, concluye el mandatario del Gernika, sabedor del impacto Urbieta para el partido decisivo del domingo.

La afición blanquinegra se ha acostumbrado a sufrir partidos de alta tensión, sobre todo cuando competían rivales inmersos en la misma batalla que el colectivo de Gorka Iraizoz, al que le avala sus buenos resultados ante los equipos de su liga en Urbieta. De hecho, ninguno de los conjuntos situados por debajo suyo en la tabla ha sido capaz de asaltar el feudo gernikarra. Barbastro, Izarra, Calahorra y Anguiano regresaron de vacío a sus respectivas casas, mientras que el Subiza y el Tudelano se tuvieron que conformar con arañar un punto. Incluso, el Deportivo Aragón, que precede en la clasificación al Gernika, también hincó la rodilla. Como recalca Koldo Zabala, su equipo “no puede fallar” ante la Real Sociedad, que no se juega nada, “y si fallamos, fallamos todos”. Pero se queda con el otro mensaje: “Está en nuestras manos”.