La Segunda División, ahora denominada Liga Hypermotion, se pone en marcha en Lezama tras experimentar el pasado curso una de las ediciones más igualadas de los últimos tiempos. La pelea fue titánica por lograr un anhelado ascenso que consiguieron materializar Granada, Las Palmas y Alavés con sangre, sudor y lágrimas, de felicidad en este caso. Fueron los tres clubes que dieron el salto a la máxima categoría y que serán reemplazados esta temporada por los descendidos Elche, Valladolid y Espanyol. El conjunto catalán, que lidera una amplia lista de candidatos al ascenso, asoma como el equipo con mayor presupuesto de una competición sin equipos andaluces por primera vez en la historia y que promete grandes emociones un año más. La exigencia, que se presume mayúscula a lo largo de las 42 jornadas de la liga regular, obligará a dar lo mejor de sí a los 22 clubes participantes en la búsqueda de sus respectivos objetivos.
Con el reto de ascender a Primera División parten una decena de equipos entre los que vuelven a figurar el Levante, rival del Amorebieta esta tarde en la apertura del campeonato; y Eibar, cuya dirección asume Joseba Etxeberria como sustituto de Gaizka Garitano. Históricos como Oviedo, Tenerife, Zaragoza, Albacete, Racing de Santander y Sporting de Gijón pelearán también por establecerse en la zona alta de la clasificación a sabiendas de que cualquier desliz puede abocarles a una indeseada lucha por no perder pie en la categoría. Fue el caso el pasado ejercicio del Málaga, que descendió a Primera RFEF 25 años después. Le acompañaron en la desgracia Ponferradina, Ibiza y Lugo, cuyas plazas pasan a ocupar Amorebieta, Alcorcón, Racing de Ferrol y Eldense, equipo que compartió grupo con los zornotzarras la pasada campaña en la categoría de bronce del fútbol estatal y que regresa a la élite sesenta años después.
Seis entrenadores vascos
La presencia de técnicos nacidos en Euskal Herria volverá a ser notable en la Liga Hypermotion. Haritz Mujika (Amorebieta), Joseba Etxeberria (Eibar), Eder Sarabia (Andorra), José Ángel Ziganda (Huesca), Asier Garitano (Tenerife) y Jon Pérez Bolo (Burgos) serán los seis representantes vascos en los banquillos de una competición que no ofrecerá margen para el respiro y que arranca con 492 futbolistas inscritos. 106 de ellos, el 21,5% del total son extranjeros con una media de edad en la categoría de 26,8 años a falta de que los clubes definan sus plantillas antes del cierre del mercado estival.
