No son buenos tiempos para la lírica en el Amorebieta. El conjunto azul ha entrado en una dinámica negativa que genera preocupación en su entorno, aunque aún no se ha encendido la luz roja, según estima la Junta Directiva. Lo cierto es que el conjunto de Haritz Mujika sufrió el domingo todo un varapalo con su derrota en Urritxe frente al Numancia, en un partido que no supo amarrar pese a adelantarse en el marcador al filo del descanso y ya en el segundo acto el conjunto soriano selló una inesperada voltereta que mete al Amorebieta, aspirante a pujar por cotas más altas, en puestos de descensos después de encadenar cuatro jornadas sin conocer la victoria y en las que solo ha sumado un punto de doce posibles. Así las cosas, el cuadro vizcaino está obligado el domingo a sacar un resultado positivo en el Stadium Gal, donde rinde visita al Real Unión, con el que se encuentra empatado en la tabla a cinco puntos.

Haritz Mujika insiste en que son los errores propios los que están condenando a su equipo. Es ya una mala costumbre. Y el Numancia se aprovechó de los despistes de la zaga azul, una debilidad que el técnico requiere corregir cuanto antes. “Se nos va un partido como el pasado, en el que el rival nos gana con muy poco. Es un hecho al que tenemos que darle una vuelta. Otro gol a balón parado, cosas que tenemos que trabajar más, competir más, estar al cien por cien los 90 minutos. Son detalles y son los que cuentan en el fútbol. Nos están penalizando mucho nuestros errores”, reflexionó el guipuzcoano, que pide a su plantilla “seguir trabajando y mejorar, competir”. Mujika reconoció que el nuevo revés le da “rabia”, porque, a su juicio, “fuimos superiores” y si “ por lo menos el rival te ha dominado, ha tenido las ocasiones... dices que has librado, pero es que tenemos buen juego, tenemos balón...”, añadió el técnico azul, que justificó la titularidad del central Javi Murua en que “va bien a las disputas. Yo no hago pruebas, confío en los 22”.