Eibar3

Espanyol0

EIBAR: Riesgo, Rubén Peña, Arbilla, Bigas, Cote; De Blasis (Min. 82, Escalante), Diop, Jordán, Cucurella; Enrich (Min. 86, Cardona), Kike García (Min. 77, Charles).

ESPANYOL: Diego López; Javi López, Naldo (Min. 60, Borja Iglesias), Lluis, Didac Vila; Melendo (Min. 69, Piatti), Roca, Víctor Sánchez (Min. 62, Hermoso), Granero; Puado, Leo Baptistao.

Goles: 1-0: Min. 24; Enrich. 2-0: Min. 51; De Blasis. 3-0: Min. 84; Charles.

Árbitro: Martínez Munuera. Amonestó por el Eibar a Jordán, Enrich. Del Espanyol a Didac Vilá, Baptistao y Granero.

Incidencias: Ipurua, 3.592 espectadores.

eibar - El Eibar de Mendilibar se coloca undécimo en la clasificación después de golear a un Espanyol que sigue en plena crisis y que poco pudo hacer ante la superioridad de un equipo local que necesitaba volver a ganar después de que no lo hiciera desde octubre, cuando venció por idéntico resultado al Real Madrid en Ipurua.

El Eibar parecía fiel a su guión de crear ocasiones, achuchar al rival, pero no acertar, es decir, la misma tónica de las últimas semanas, en este caso ante un Espanyol que no encontraba la forma de salir de su campo con criterio.

Enrich tuvo en sus botas el primero, en un clarísimo mano a mano que no supo definir y que Diego López envió a saque de esquina, pero poco menos de un minuto después, el propio Enrich se redimía de su error y anotaba el primero al aprovechar un rechace para poner un 1-0 que despertó por fin a la grada local.

El Espanyol se plantaba en otro partido y debía, eso sí, demostrar algo más. Y de hecho los de Rubí se vinieron arriba en los siguientes minutos poniendo en riesgo la victoria armera, aunque sin acierto. Leo Baptistao se encargó muy pronto de infundir el miedo en una jugada individual y De Blasis puso el segundo en el casillero del Eibar para desesperación de Rubí. El Espanyol no encontraba la tecla hasta ese momento, y Riesgo era un mero espectador. Charles, que enganchó una buena volea para batir por bajo a Diego López, sentenciaban así el partido y, a la vez que se liberaban de un gran peso, echaban más sal en la herida de un Espanyol. - Efe