BILBAO. Urkullu, que "desde luego" que asistirá a la final de Copa, ha reiterado en una entrevista en Radio Popular de Bilbao que le parecería "extraordinario" que esa final se jugara en San Mamés para propiciar un "hermanamiento" entre las aficiones vascas y de estas con la catalana.
Sin embargo, ha aceptado que "no puede ser" porque hay un evento, el concierto de Guns N'Roses del 30 de mayo, tres días después de la final, ya contratado y que impide la celebración de la final.
Al ser preguntado por las pitadas al himno español en finales anteriores disputadas por el Barcelona y el Athletic, Urkullu ha pedido "respeto institucional" porque es un "signo de cultura y educación" de una sociedad.