Un gol que vale su peso en oro

Bilbao Athletic1

VILLANOVENSE: Ratón, Moraga (Min. 79, Trinidad), Jair, Owona, Tapia, Javi Sánchez (Min. 76, Pajuelo), Jairo (Min. 62, Garrido), Salvi, José Ángel, Espinar y Carlos Fernández.

BILBAO ATHLETIC: Remiro, Lekue, Yeray, Unai Bilbao, Iriondo, Undabarrena, Vesga, Jurgi, Bengoa (Min. 83, Iturraspe), Sabin Merino (Min. 57, Etxeberria) y Santamaría (Min. 75, Villalibre).

Goles: 1-0: Min. 49; Javi Sánchez. 1-1: Min. 68; Bengoa. 2-1: Min. 78; Espinar.

Árbitro: Santos Pargaña (andaluz). Mostró tarjeta al local Javi Sánchez y a los visitantes Iriondo y Lekue.

Incidencias: Lleno en el Estadio Romero Cuerda con más de 3.000 espectadores.

bilbao - Se vuelve con vida el Bilbao Athletic de Villanueva de la Serena. Con vida porque supo crecer cuando se vio con el marcador adverso, por un rival enrabietado, empujado como es lógico por un campo repleto, hasta ser capaz de empatar y tomar oxígeno. Después, llegó el segundo gol, que trajo consigo la derrota. Seguramente, justa. Aunque bien es cierto que los rojiblancos tuvieron opciones en esos minutos locos del segundo acto, incluso para rascar algo más que este marcador adverso por la mínima. Así que buen resultado, aunque también hay que decir en el debe de los vizcainos que pudo haber sido mejor si los dos goles, fruto de sendos errores claros en la zaga, no se hubieran producido en un partido tan importante.

La primera parte fue de poco peligro. De esas en las que las defensas se imponen a las delanteras. Más ocasiones para los de casa, pero Remiro estuvo seguro. José Ángel se lanzó a un balón en plancha, pero desviado. Bengoa probó suerte en una falta pero el balón se estrelló en la barrera. Poco dominio continuo y mucho balón largo. El campo pequeño, como se sabía, y el balón muy botón. Remiro tuvo que detener en la misma línea de gol un remate de Carlos Fernández. Lekue entra por la derecha y Bengoa remata alto. Remiro, otra vez, realiza un paradón a disparo de Carlos Fernández. Parecían tener mejor estudiados los de casa a los visitantes o pudo ser que con un campo a reventar, el Villanovense encontrara el carburante adecuado para vencer en el choque de ida de la primera eliminatoria de ascenso a la Liga Adelante. Este triunfo llegó tras el descanso.

Una segunda parte explosiva trajo consigo los tres tantos del partido. El primer gol de la temporada de Javi Sánchez vino a premiar el pundonor local. Una jugada ensayada tuvo este premio. Una falta sacada a la izquierda con pase de cabeza de Owona al centro del área le cae al centrocampista que campea en el área pequeña como quiere con el balón, recortando y batiendo a Remiro. Era una mala noticia y peor la lesión de Sabin Merino. El equipo quedaba algo tocado y Remiro tuvo que desviar lo suficiente para que Jairo no hiciera el segundo. Pero, curiosamente, el filial bilbaino sacó fuerzas suficientes del infortunio para salir con vida de Badajoz. El obligado cambio de Merino dio entrada a Etxeberria al lateral derecho y Lekue se desplazó de extremo zurdo, que con el partido abierto jugó a placer a pierna cambiada. Entró por su carril las veces que quiso y rompió el esquema local que se estaba imponiendo. A la primera, hizo bingo. Entró hasta línea de fondo y su centro atrás lo remató Bengoa, lo despejó el portero, y a la segunda llevó el esférico a la red. Era el empate y los de casa empezaban a acusar su esfuerzo físico de la primera hora. Otra vez entró Lekue y Santamaría remató de cabeza fuera por muy poco. Y, una tercera del bilbaino, en la que su centro desde línea de fondo lo cazó Bengoa y el posterior rechace Santamaría tampoco lo pudo llevar a la red por poco. No llegaba el segundo, con los locales acusando el cansancio, pero un nuevo error en la marca de Unai Bilbao, propició el remate de cabeza de Espinar a centro de José Ángel y los serones tomaban ventaja. A cinco minutos del final, pudo llegar una peor noticia con un remate al larguero desde fuera del área de Tapia y el rechace a punto estuvo de cazarlo Carlos. Fue un mal menor.

Ahora el sueño del Villanovense sigue vivo a fuerza de trabajo, sacrificio y humildad, pero para pasar a la siguiente eliminatoria no es suficiente y también deben superar a los cachorros en San Mamés, el próximo domingo a las 20 horas.