SESTAO: Montero, Azkoiti, Unai Calvo, Eneko, Terrón, Larrazabal, Solabarrieta (Min. 79, Apraiz), Jokin, Silas, Abasolo y Hernáez (Min. 70, Orbegozo).
SD LOGROÑÉS: Gonzalo, Metola, Ledo, Olavarrieta (Min. 84, Tamayo), Miguel, Esaúl (Min. 70, Hierro), Jon Moya, Gerardo, Israel, Del Puente y Toledo (Min. 59, Laencina).
Gol: 0-1: Min. 70; Olavarrieta.
Árbitro: Sánchez-Seco. Expulsó al local Silas (Min. 90). Amonestó a Larrazabal y Gúermes, por el Sestao, y a Ledo, Israel, Metola y Miguel por el Logroñés.
Incidencias: 1.000 espectadores en Las Llanas.
sestao. Derrota del Sestao en la visita del Logroñés a Las Llanas, en un encuentro que tuvo una parte para cada equipo. Si bien los locales disputaron una buena primera mitad, especialmente en su tramo final, en que dispuso de varias ocasiones para abrir el marcador; fue el conjunto riojano el que, jugando a la contra, destrozó a los verdinegros tras el descanso. Y es que el Logroñés marcó prácticamente en su primera jugada de peligro, en una contra impecablemente finalizada por Olavarrieta con un disparo cruzado. De ahí al final del encuentro se asistió a todo un ejercicio de impotencia por parte del cuadro sestaoarra, incapaz de llevar llegar al área contraria, mientras el Logroñés, en diferentes contragolpes, pudo incluso aumentar su ventaja.
Y eso que el partido parecía muy de cara para el Sestao. El conjunto de José Luis Ribera fue el que tuvo el control del juego y el que más peligro creó a lo largo de toda la primera parte. Sin embargo, se mostró desacertado de cara a puerta y esto terminó condenándolo. Al borde del descanso, Abasolo dispuso de una buena ocasión, pero el esférico marchó fuera, excesivamente cruzado. El 0-0 al descanso reflejaba un excesivo premio para un Logroñés que casi no había puesto a prueba a Montero, salvo en un cabezazo de Esaúl casi a la media hora.
Sin embargo, la segunda mitad decayó en intensidad, aunque era el Sestao el que seguía llevando la batuta del juego. El Logroñés, encerrado en su campo, esperaba los contragolpes para intentar adelantarse. Y prácticamente en la primera contra que le salió bien, marcó. Olavarrieta recogió un balón despejado por la defensa, avanzó hasta el área de Montero y cruzó el balón hasta el fondo de la red. El Sestao, sin norte desde el gol encajado, casi no dio réplica en los veinte minutos restantes.