REAL SOCIEDAD: Bravo; Carlos Martínez, Labaka, Mikel González, De la Bella; Rivas, Aranburu (Min. 85: Estrada), Xabi Prieto, Griezmann (Min. 79: Sarpong), Zurutuza (Min. 54: Elustondo); Joseba Llorente.

RACING: Toño; Enrique, Torrejón, Cisma, Francis; Colsa, Diop (Min. 41: Lacen), Rosenberg, Munitis, Kennedy (Bedia, min. 68), Nahuelpan (Min. 58: Iván Bolado).

Gol: 1-0: Min. 7; Joseba Llorente.

Árbitro: Alvarez Izquierdo (Comité catalán). Tarjeta amarillas a Rivas, Kennedy, Diop, Colsa, Cisma, Torrejón y Francis.

Incidencias: Partido correspondiente a la décima jornada de la Primera división disputado ante unos 25.000 espectadores en el estadio de Anoeta.

DONOSTIa. La Real Sociedad enlazó su cuarta victoria en los últimos cinco partidos, tercera consecutiva, y anoche sus jugadores se pudieron acostar en puestos de Liga Europa tras ganar con buena ley a un Racing de Santander que baja muchos enteros en sus prestaciones cuando juega lejos de El Sardinero y sólo puso en aprietos al equipo txuri-urdin en contadísimas ocasiones.

De momento, la Real Sociedad, que hace un año peleaba duramente por regresar a la División de Honor, ahora se ha hecho con el derecho de soñar con Europa, para dispusto de su entrenador, Martín Lasarte, que clama contra este grado de euforia cuando la temporada apenas ha dado sus primeros pasos.

Lo cierto es que, en las vísperas, en el seno de la Real se tenían buenas sensaciones. No en vano la estadística, a veces tan caprichosa, pero en algunos supuestos escrupulosa en su cumplimiento, le cargó de razones para perjuicio de un Racing que por costumbre no saca buenos resultados de Anoeta y que también encaja goles en la mayoría de los partidos dentro del primer cuarto de hora.

Se cumplió la máxima en Donostia, porque los cántabros encajaron el único gol, suficiente para volver con la derrota a cuestas, en el minuto 7, tras una asistencia de Xabi Prieto a Joseba Llorente, que como se encuentra en estado de gracia, tuvo claridad y acierto para batir la portería de Toño.

Diop y Kennedy entraron finalmente en el once titular del equipo cántabro, tras las dudas planteadas por su precario estado físico, y a la hora de la verdad ambos pasaron con más pena que gloria, con pocas opciones para el lucimiento. Ambos fueron sustituidos tras ver los dos la tarjeta amarilla.

Los donostiarras, con el viento a favor tras el gol, hicieron su partido con un férreo control al equipo que entrena Miguel Angel Portugal y salidas fulgurantes que morían casi siempre en el límite del área grande visitante.

Merecía el triunfo el conjunto donostiarra pero, por la estrechez del resultado, debido sobre todo a que la perla de la Real, Griezmann, no tuvo precisamente su tarde a la hora de rematar, a veces por su mal tino y en otras ocasiones por la inspiración de Toño, y el propio empuje de los cántabros, esta victoria se vio comprometida en los últimos minutos de partido, en los que estuvo a punto de dejarse dos puntos en un remate postrero de Colsa.

También Jeffrey Sarpong, aclamado en Anoeta cada vez que pisa el césped, tuvo una última opción de gol para haber dejado el 2-0 que quizás hubiera sido un reflejo más fiel de lo que ocurrió en Anoeta.

Al término del encuentro Martín Lasarte, técnico de la Real, confesó su sensación de que su equipo "no debió sufrir tanto", además de advertir de que son otros los objetivos del equipo, es decir, la permanencia en Primera y no Europa, y que la próxima semana "va a ser dura".

"Nosotros no vamos a encargar un traje que no nos corresponde", advirtió Lasarte sobre las opciones clasificatorias de la Real y, tras señalar que su plantilla puede "ser inferior a las de otros equipos", se mostró satisfecho por haber podido "solidificar a un grupo de jugadores heterogéneos" con la virtud de "jugar como uno" e incluso "a veces llegar a gustar".