La cartera crediticia de las entidades financieras vascas tiene la tasa de morosidad más baja y no hay señales que apunten a un incremento de los impagos. No tiene la misma sensación la banca que opera básicamente en el mercado estatal y tienen impacto limitado en Euskadi. A su juicio las condiciones de acceso al crédito se van a endurecer en este primer semestre del año precisamente porque esperan que la mora aumente los próximos meses.

Esa variable con signo negativo no aparece en la actividad financiera de la CAV. Fuentes del sector consultadas por este diario, reconocen que la subida de tipos de interés ya frenó a finales del año pasado la petición de crédito. El cambio de política monetaria ha encarecido las hipotecas vivas, pero también ha elevado el listón para las familias que quieren entrar en el circuito. Sin embargo, técnicamente se da por finalizada esa fase. “Otra cosa es que el BCE vuelva a subir los tipos, pero en estos momentos nadie piensa en ese escenario”, afirman desde la banca vasca.

Todo lo contrario, está descontado que este año bajará el precio del dinero y la duda es cuándo se producirá. De hecho, sorprendieron la semana pasada y volvieron a agitar el euríbor las declaraciones de la presidenta del Banco Central Eropeo, Christine Lagarde, en las que admitía por primera vez que es “probable” que la entidad baje los tipos, aunque matizó que sería en todo caso en verano. Más tarde de lo que esperaban el mercado y la mayoría de los analistas.

De modo que todo apunta a que el mercado del crédito mantendrá en la CAV las actuales condiciones durante varios meses. En cambio, la banca estatal se prepara para otro giro de tuerca. Así cabe interpretar de la Encuesta de Préstamos de Banco de España, hecha pública ayer martes. En ella las entidades anticipan un “ligero endurecimiento generalizado” de las condiciones crediticias por el repunte de la morosidad.

Precisamente, durante la segunda mitad de 2023 la ratio de dudosos ya propició un “cierto endurecimiento” de los criterios de concesión en los créditos a hogares, tanto en hipotecas como en consumo. Banco de España explica este endurecimiento en el “aumento de los riesgos percibidos”, así como por la “menor tolerancia” a los mismos. En referencia al cuarto trimestre, la encuesta elaborada por el supervisor refleja que se mantuvo la contracción de oferta y demanda de crédito. Sin embargo, el ritmo de contracción fue menor que en el trimestre anterior.

Entre octubre y diciembre, los criterios de concesión solamente se endurecieron en el segmento de préstamos a familias para consumo y otros fines, aunque de forma más moderada que en el trimestre previo. Esta restricción responde también al aumento de riesgos percibidos y a aspectos relacionados con el capital bancario y su coste.

Asimismo, se endurecieron de forma generalizada las condiciones de los nuevos préstamos, de forma menos intensa eso sí que en el tercer trimestre. Así, se habría observado un “ligero aumento” de los márgenes en los segmentos de financiación a empresas y a hogares para adquisición de vivienda.

En cuanto al porcentaje de solicitudes de crédito rechazadas, este aumentó en el segmento de financiación a hogares para consumo y otros fines, mientras que se mantuvo estable tanto en los préstamos otorgados a empresas como en los concedidos a hogares para compra de vivienda.

En lo que se refiere a la demanda, se redujo en todos los segmentos, al igual que en el trimestre anterior, aunque a un ritmo más moderado. La encuesta elaborada por Banco de España atribuye la caída de la demanda al “elevado nivel” de los tipos de interés. En el segmento de empresas, el efecto de los tipos se vio compensado por las necesidades de financiar existencias y circulante, mientras que en el caso de los hogares, el descenso también se debe a la menor confianza de los consumidores y las peores perspectivas del mercado de la vivienda.

La presión de los tipos

3,610

La media mensual del euríbor se situó ayer en 3,610% confirmando la tendencia a la baja desde noviembre tras el máximo del ciclo registrado en octubre. Con todo, esa trayectoria se vio alterada la semana pasada tras el mensaje de Christine Lagarde (BCE) en el que apuntaba a que los tipos de interés no bajarán hasta el verano.

l Situación en el Estado. Los bancos que tienen su mercado principal fuera de Euskadi han traslado al Banco de España su previsión de endurecer en el primer semestre las condiciones de acceso al crédito en el Estado por un esperado repunte de la morosidad. Es una dinámica que también se produjo en el tercer y, en menor medida, en el cuarto trimestre del año pasado por el impacto de la escalada de los tipos de interés.