Las ejecuciones hipotecarias sobre viviendas aumentaron en Euskadi un 26,4 % en el segundo trimestre del año al registrarse 67 frente a las 53 del mismo periodo del año pasado, con lo que se rompe una tendencia descendente de prácticamente un año.

En el primer trimestre de 2022 hubo 82 ejecuciones hipotecarias, en el segundo 53, en el tercero 24 y en el último 25. En total, el ejercicio se cerró con una disminución del 21,3 % y en el primer trimestre de 2023 se mantuvo la tendencia descendente, con una bajada interanual del 67 %.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), todos los procedimientos de embargos iniciados entre abril y junio de este año en Euskadi fueron sobre viviendas usadas y la mayoría (47) se referían a personas físicas.

Hubo además 18 ejecuciones sobre otro tipo de fincas como locales, garajes, oficinas, trasteros y naves, y solares.

Por el contrario, en el conjunto del Estado el número total de inscripciones de certificaciones por ejecuciones hipotecarias sobre viviendas se redujo un 16,7 % al quedarse en 3.677.