El sector empresarial ligado a la industria de la Biosalud en Euskadi generó en 2022 un negocio agregado de 2.400 millones de euros, más de un 25% supe rior a las cifras de facturación alcanzadas en el ejercicio anterior. El empleo del sector supera los 10.000 profesionales, 500 más, mientras que las inversiones en áreas y programas de I+D+i superaron los 150 millones de euros.

Estos datos fueron dados a conocer en la asamblea general del Basque Health Cluster (BHC), organización que agrupa a 115 empresas y organizaciones que trabajan en el ámbito sanitario y de Biosalud en Euskadi, y que tuvo lugar el miércoles en Donostia. Este evento, incluido en el BHC Eguna que establece una cita de referencia para los distintos agentes que conforman el ecosistema del sector de la Biosalud en Euskadi, reunió en la capital guipuzcoana a más de un centenar de representantes del sector con la apertura institucional de la consejera de Desarrollo Económico y Medioambiente del Gobierno vasco, Arantxa Tapia, que hizo un repaso de los retos a los que se enfrenta el sector.

Impacto en el PIB

Durante la cita, se hizo entrega del Premio José Miguel Azkoitia a la directora del BIC Gipuzkoa Berrilan, Marisa Arriola. Durante el encuentro empresarial, la directora del Basque Health Cluster, Idoia Muñoz Lizán, destacó que el sector vive un momento “histórico”, con cifras récord en facturación, exportaciones o empleo.

Asimismo, resaltó que este ámbito, que representa ya el equivalente al 2,5% del PIB vasco, mostró en 2022 “una fotografía más que positiva” ya que una de las claves que explican esta buena evolución de la Biosalud vasca el año pasado se atribuye al “buen desempeño” de las ventas en mercados exteriores, que alcanzaron la cifra récord de 575 millones de euros, el 24% de las ventas totales, con incrementos anuales superiores al 25%.

De igual manera, en cuanto al empleo, estas “buenas cifras” de facturación se han traducido en la creación de un polo empresarial que da empleo directo a más de 10.000 personas, 500 nuevos empleos más en 2022 y una estimación acumulada de 30.000 profesionales, si se tiene en cuenta el empleo indirecto generado por las empresas auxiliares y otras organizaciones como centros tecnológicos o de investigación.