El gerente de la Organización de Productores de Pesca de Altura de Ondarroa (OPPAO), Kiko Marín, ha afirmado que el veto de la UE a la pesca de fondo apenas afecta directamente a la flota vasca, pero sí indirectamente porque los barcos gallegos perjudicados se desplazarán a pescar en sus mismos caladeros. "Posiblemente habrá problemas de cohabitación", ha augurado en declaraciones a EFE-Televisión.

Marín se ha referido así al reglamento europeo que entró ayer en vigor y que prohíbe pescar a más de 400 metros en 87 polígonos marinos, lo que en principio afecta a caladeros de interés para España como el Gran Sol (aguas irlandesas), el Cantábrico o el Golfo de Cádiz.

Marín ha criticado que el anuncio del Gobierno español sobre la presentación de un recurso contra esa medida no incluye una petición de moratoria, por lo que ya está en funcionamiento.

Ha destacado que afecta principalmente a los palangraneros, y tras precisar que en e Euskadi quedan muy pocos, ha expresado su temor a que dichos buques, fundamentalmente radicados en puertos gallegos, se desplacen a faenar a caladeros habituales de la flota vasca.

"La medida ha llegado con poco fundamento jurídico por parte de la Comisión Europea y creemos que influenciada por ONG medioambientales", ha resaltado, y ha remarcado que "pone en duda" muchos de los datos manejados para tomar esa decisión.

Ha relatado que está previsto que este año se produzca una nueva aportación de datos actualizados, y por ello, pidieron a la Comisión que esperara a conocerlos antes de aprobar el reglamento, pero no tuvieron éxito, según ha lamentado.

Ha asegurado que esta medida no repercutirá en el abastecimiento del mercado ya que, en la actualidad, "se trae pescado de todas partes el mundo".

"Si no hay pescado de aquí, vendrá de fuera, pero es una zancadilla más para nosotros, porque aunque se recurra judicialmente, la justicia es lenta y la campaña de Navidad, clave para nosotros, ya está ahí", ha criticado, por su parte, el patrón del Beti Maurixio, Alberto Yáñez.

Yañez, también en declaraciones a EFE-Televisión, ha señalado que su barco es un palangranero que faena en caladero nacional y también ha expresado su "incertidumbre" ante la posibilidad de que los barcos gallegos vayan a pescar a sus mismos caladeros.

"Para nosotros llueve sobre mojado, porque la nueva reglamentación se suma al precio disparado del gasoil, a los proyectos de eólicas...llegará un momento en el que no se puede trabajar", ha dicho.

En su opinión, el veto "está estudiado" y responde a que se quiere eliminar a los palangraneros y, "además quieren que desaparezcamos gratis. Hay intereses es este sentido en la flota europea, parte de la culpa la tienen los pelágicos", ha apuntado.

"Argumentan el tema de los fondos marinos, pero no tiene lógica cuando estamos viendo el desastre que ocasionan los pelágicos con el bonito y con barcos de más de 140 metrps", ha reprochado.