Sin embargo, sí es factible marcar unas pautas generales sobre lo que se recomienda hacer si queremos mejorar nuestra salud financiera, todo ello lo analiza Juanjo Davisson, director de Estrategia y Producto de Salud Finaniera de BBVA

¿Qué podemos entender por salud financiera? ¿Es un concepto con el que la gente esté familiarizada?

—Es un concepto cada vez más extendido, pero aún tenemos mucho trabajo por hacer para que todo el mundo lo tenga muy presente en su día a día. La salud financiera es el bienestar que podemos conseguir con una buena gestión de la economía familiar, nos permite vivir mejor y más tranquilos porque nos prepara ante imprevistos o nos permite ahorrar para la compra de una vivienda o de cara a la jubilación.

¿Por qué no podemos ahorrar? ¿Hay otros factores además de nuestra capacidad económica que nos dificulten el ahorro?

—Efectivamente, nuestros ingresos y gastos es una de las razones que nos impiden, en muchos aspectos, ahorrar lo que nos gustaría. De ahí la importancia de hacer una buena gestión de nuestra economía, para tratar de ahorrar lo máximo posible. Pero, además de esto, existen sesgos que impiden el ahorro. Por ejemplo, el sesgo de sobreconfianza sobre nuestra capacidad para alcanzar metas que supone que sabemos que deberíamos ahorrar más, pero creemos que seremos capaces de hacerlo más adelante. Otro sesgo puede ser el del presente, por el buscamos gratificaciones inmediatas, infravalorando los beneficios futuros; el sesgo de la aversión a la pérdida, que nos dice que damos más valor a evitar pérdidas que a tener ganancias de la misma cuantía o el sesgo de status quo, que es la tendencia a aceptar lo que nos viene dado.

En este caso, ¿qué medidas deberíamos adoptar para lograr esta meta?

—Fijarse metas de ahorro es un buen comienzo. Hay una regla, la del 50-30-20, que nos puede ayudar, porque nos da una idea de qué porcentaje de nuestros ingresos tenemos que destinar a cada cosa. Esto supone que el 50% de los ingresos se pueden destinar a gastos fijos (luz, agua,..), el 30% a gasto variable (ocio o restaurante) y el 20% restante al ahorro. En caso de que no podamos ahorrar el 20% de nuestros ingresos, tendremos que ver qué porcentaje podemos guardar, pero lo que tenemos que tener claro es que un mínimo, por poco que sea, lo tenemos que destinar al ahorro. Lo más importante es generar esta pauta, ese hábito, igual que tenemos claro que tenemos que comer de forma sana o hacer deporte para tener una vida saludable. Para ello tenemos trucos o herramientas, como destinar un porcentaje de la nómina a una segunda cuenta de forma automática a través de la app; redondear nuestra compras para ahorrar esa diferencia en una segunda cuenta; crear presupuestos, etc.

¿Cómo podemos concienciar de la importancia de gestionar la salud financiera en un momento de crisis económica como el actual?

—Precisamente, ahora es más importante que nunca, ya que una buena gestión de salud financiera nos permite tener un colchón para afrontar imprevistos o períodos de crisis. La gestión de la salud financiera no debe ser una acción vinculada a un momento en concreto, debe acompañarnos durante toda la vida y debemos empezar desde edades tempranas, ya que tampoco está relacionado con la edad. Los jóvenes tienen que aprender a gestionar de forma eficiente su economía para que cuando se incorporen al mercado laboral puedan aplicar reglas de gestión adecuada a sus ingresos. Es importante que entre todos se conciencie y se eduque para que todos seamos capaces de gestionar nuestra propia economía. La gestión de la salud financiera está al alcance de todos.

Hace unos días se publicaron los resultados de una encuesta realizada por Kantar que señalaba que siete de cada diez españoles afirman tener que mejorar su salud financiera. ¿ Qué consejos le podrías dar para mejorar en este aspecto?

—Efectivamente, los datos demostraban que el 68% de los encuestados afirmaban que les gustaría mejorar su salud financiera. El estudio también revelaba que BBVA es la entidad más capacitada para gestionar y mejorar su salud financiera. Por ello, el compromiso de educar y fomentar a cada uno de nuestros clientes sobre sus finanzas personales es un papel fundamental en el día a día de la entidad. Sobre qué consejo daría a estas personas, tal y como he dicho anteriormente, todos nosotros podemos mejorar nuestra salud financiera, con independencia de la capacidad económica que tengamos. Lo importante, y esto es lo que nunca debemos olvidar, es la gestión adecuada de nuestro dinero. Tenemos que prestar atención a los gastos, controlarlos eficazmente, y destinar una parte de nuestros ingresos a los ahorros, pero siempre teniendo en cuenta la capacidad que tenemos cada uno de nosotros. Con estos pequeños consejos, seremos capaces de responder a imprevistos y, a la vez, planificar para alcanzar objetivos futuros. Todo ello, además, nos dará tranquilidad y seguridad.

Y si tenemos ahorros pero queremos invertir, ¿qué tenemos que tener en cuenta?

—La inversión es una de las cuestiones que más preocupa a la sociedad. De hecho, la encuesta nos muestra que a más de la mitad de los españoles (un 56%) les gustaría saber cómo invertir su dinero para generar más beneficios. A la hora de invertir es importante visualizar nuestro patrimonio completo, es decir, lo que tenemos, menos lo que debemos, para disponer de una radiografía completa y exacta de cuál es el estado de nuestras finanzas y poder tomar mejores decisiones. En este sentido, la 'app' de BBVA permite conocer de un solo vistazo cuál es la situación financiera en cada momento, ya que nos permite visionar lo que tenemos invertido, el valor de nuestra vivienda y la suma de lo que debemos, por ejemplo. Podemos disponer también información relevante sobre la vivienda, como cuánto pagamos de hipoteca, los gastos mensuales asociados a nuestra casa que tenemos que afrontar cada mes e, incluso, consejos para tener un consumo más responsable, económico y sostenible de los suministros de luz y gas. Además, gracias al servicio de agregación podemos incorporar las posiciones que tenemos en otros bancos, lo que nos ofrece una visión completa de nuestro patrimonio. Cuando tenemos controlada la parte de la gestión de los gastos, es momento de rentabilizar nuestras inversiones. La 'app' de BBVA ayuda a los clientes a analizar la situación económica y a encontrar la inversión que mejor se adapta al perfil de riesgo y a nuestra situación personal, y permite hacer seguimiento de lo que se ha invertido.

La deuda es también un factor importante a la hora de gestionar nuestra salud financiera, ¿qué debemos tener en cuenta en este sentido?

—En primer lugar hay que tener en cuenta que la deuda no es mala, sólo hay que saber gestionarla. Es más, la deuda, en muchos casos, nos puede ayudar a incrementar nuestro patrimonio, de forma que también puede ser considerada como una forma de ahorrar. La deuda no debería suponer más del 35% de nuestros ingresos. En la gestión, debemos tener en cuenta factores como los ingresos y los gastos mensuales, la deuda que ya tengamos adquirida, los proyectos futuros que tengamos previsto acometer o si, además, queremos ahorrar para la jubilación u otras metas. Todo esto nos ayudará para saber qué nivel de deuda podemos asumir para que sea sostenible, podamos afrontarla y, además, nos permita cierta calidad de vida.

¿Cómo puede la tecnología ayudar a mejorar nuestra salud financiera?

—La adopción de la tecnología es cada vez mayor en la sociedad y las herramientas que disponemos son cada vez mejores y más fáciles. De hecho, la pandemia ha provocado una democratización de la tecnología nunca antes vista y ha acelerado su uso exponencialmente. Debemos aprovecharnos las ventajas que ofrece. En este sentido, la 'app' de BBVA permite a los clientes ver e identificar de una manera clara y sencilla y de un solo vistazo en qué se han gastado el dinero y cuánto en un periodo concreto. Esta información es clave para tener un control a diario de los gastos. También avisa cuando se ha alcanzado el límite de tus presupuestos y si se está gastando más de lo que se tenía previsto. Asimismo, ofrece información sobre el gasto de tus suscripciones y permite simular cuánto te ahorrarías si eliminas alguna de ellas. Asimismo, advierte de la llegada de recibos para poder planificar y gestionar pagos y pone a disposición de los ofrecemos consejos de ahorro personalizados, así como herramientas que permiten hacerlo, como por ejemplo, el redondeo de compras con tarjeta. Además, permite visualizar la deuda de un solo vistazo, así como el esfuerzo económico que supone y cuál es el límite de deuda que se puede asumir de forma saludable teniendo en cuenta ingresos y tus gastos.

Y para finalizar, la planificación financiera es realmente importante cuando hablamos de jubilación. En este sentido, ¿qué aconsejaría a un ahorrador individual?

—Hace unos días, el Instituto BBVA de Pensiones dio a conocer los resultados de la última encuesta sobre pensiones y hábitos de ahorro en los baby boomers. Algunas de las conclusiones que recogía el estudio indican que dos de cada tres baby boomers del País Vasco consideraban que la vida de los jubilados de su propia generación será peor que la de los actuales jubilados. La encuesta además indicaba que la mayoría de los entrevistados en Euskadi piensa que tendrá que jubilarse más tarde y tendrá menor pensión. Estos datos reflejan una vez más la importancia de hacer una buena planificación financiera cuando hablamos de jubilación. Por ello, creo que el consejo que podría dar a cualquier persona es que ahorren, y que lo hagan con independencia del vehículo que elijan. Tenemos que ser conscientes que el ahorro para la jubilación forma parte de nuestra salud financiera. Hay que comenzar a gestionar la salud financiera desde edades tempranas para que podamos no sólo gestionar nuestros gastos y presupuestos del día a día, también el ahorro para nuestra jubilación.