El precio de la luz sigue su escalada y hoy jueves marcará otro récord: 141,71 euros el megavatio hora. En este contexto, Endesa e Iberdrola urgieron al Gobierno español a modificar la tarifa regulada (la que está sujeta a la volatilidad de los precios) para que deje de depender de la evolución del mercado mayorista eléctrico (pool). Además, pidieron al Ejecutivo de Sánchez una solución negociada para la hidráulica y la nuclear.

Durante su intervención en un foro energético organizado por El Economista, la consejera delegada de Iberdrola España, Ángeles Santamaría, subrayó que llevan advirtiendo de la necesidad de revisar el diseño de la tarifa regulada o PVPC desde su creación y que ahora es "urgente" hacerlo, dado que el pool lleva marcando máximos históricos desde junio. En este sentido, explicó que en Portugal, que comparte pool con el Estado español, los consumidores no se han enterado de estos máximos porque su tarifa regulada se fija anualmente en función de los mercados de futuro y las estimaciones del regulador.

En el Estado, en cambio, los precios en el mercado mayorista se fijan a través de una subasta en el que las comercializadoras y generadores de electricidad lanzan sus ofertas para cada hora del día siguiente. Este sistema afecta a unos 11 millones de consumidores que están acogidos a la tarifa regulada. En opinión de Santamaría, la solución pasa también por rebajar la fiscalidad que grava el recibo de la luz, y que en el Estado es una de las más altas de Europa.

Y este es uno de los puntos en los que se está centrado en Gobierno de Sánchez. La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, confirmó ayer miércoles que la fiscalidad es uno de los elementos sobre los que se está trabajando dentro del plan de choque que pretende aprobar en las próximas semanas para atajar la subida de la luz y amortiguar así el impacto de los mercados mayoristas.

"Una de las posibilidades que hay es trabajar sobre esta hipótesis y que haya elementos fiscales que tengamos que retocar aunque sea de manera provisional", señaló. Ribera anunció, asimismo, que "pronto" se conocerá la propuesta conjunta del Ejecutivo sobre el plan de choque para atajar la subida de luz, aunque prefirió no adelantar medidas concretas hasta tenerlo por completo.

En este sentido, el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, insistió ayer miércoles en que el Ejecutivo va a desplegar nuevas medidas que se sumarán a las ya adoptadas con el objetivo de que al final de 2021 los consumidores paguen lo mismo de luz que a finales de 2018 -descontando el IPC-. Entre ellas se incluyen reformas estructurales destinadas a potenciar las energías renovables y medidas de protección a los consumidores más vulnerables, como el "consumo mínimo vital", complementario al ingreso mínimo vital. Asimismo, también recordó la puesta en marcha de medidas fiscales para amortiguar el impacto de la subida del precio mayorista en el recibo de la luz y la necesidad de que "parte del sobrebeneficio que están teniendo las empresas eléctricas no vaya a sus cuentas de resultados, sino que vaya, en forma de minoración, al precio de la luz de los consumidores finales".

Hidráulicas y nucleares

Por su parte, el consejero delegado de Endesa, José Bogas, insistió en que los altos precios del pool se deben al gas y que el problema seguirá hasta que no se busque una solución respecto a cómo se traslada su coste a la factura de la luz. Tras defender la eficiencia del sistema de fijación marginalista de precios que impera en toda Europa, señaló que hasta agosto, un cliente "típico", ha pagado por la luz unos 56 euros al mes, 10 euros más que el año pasado, y un precio similar a lo pagado en 2012, 2105 y 2018 (unos 54 euros). En este sentido, Bargas pidió también que se desligue la tarifa regulada del pool, como ocurre en el resto de Europa.

"Sólo tenemos nosotros PVPC y, además, hay que bajar los impuestos porque tenemos muchos", manifestó el ejecutivo. El consejero delegado de Endesa se mostró favorable a la posibilidad de sacar del mercado a las centrales hidroeléctricas y nucleares porque eso permitiría que se viera "clarísimamente" el precio al que se deben retribuir y dejar de hablar de "beneficios caídos del cielo".

"Estos debates me aburren en el sentido de que parece que estamos buscando culpables, cuando lo que tenemos es que buscar soluciones", añadió el máximo ejecutivo de Endesa, tras cargar contra las millonarias primas que se dieron a las primeras renovables (por las que se pagarán 250.000 millones en 25 años, según sus cálculos). En cuanto a la centrales nucleares, aseguró que no tiene sentido apagarlas antes de 2035 porque juegan un papel muy relevante en la transición, a lo que añadió que no cree que una empresa pública las fuera a gestionar mejor que una privada.