El comité de empresa de PCB-ITP Aero ha acusado a la dirección de "emprender una dinámica de escarmiento" contra la plantilla por las movilizaciones realizadas contra el ERE anulado por el TSJPV y de "criminalizar la lucha por el mantenimiento del empleo".

En una rueda de prensa, el comité de empresa ha asegurado que debido a la "lucha llevada a cabo contra el despido colectivo en las plantas de Sestao y Barakaldo", que afectaba a 87 trabajadores, la dirección decidió "emprender una dinámica de escarmiento" contra la plantilla "en su totalidad".

Ha denunciado que ha adoptado "una serie de decisiones que atentan contra los derechos de los trabajadores", como la imposición de los ciclos vacacionales y un ERTE, que afecta a unos 290 trabajadores hasta el 31 de diciembre de 2022 y que ha sido recurrido ante la justicia.

Además, trabajadores que secundaron la huelga indefinida contra el ERE han sufrido "movimientos de puestos", que han afectado a personas con una larga experiencia, más "la intención de quitar las limitaciones que algunos trabajadores tienen por causas médicas para desempeñar ciertas funciones".

El comité ha agregado que la dirección también ha recurrido a la vía judicial "para dar continuidad a esta ola represiva", de manera que mañana jueves declara en el Juzgado de Barakaldo el delegado de LAB en PCB-ITP, Zigor Azpiolea, acusado, por la vía penal, por un delito de daños.

Coincidiendo con su declaración, el comité ha convocado una concentración, a las 11:00 horas, frente a los Juzgados de Barakaldo, en solidaridad con su compañero y para "exigir a la dirección la retirada de todas las causas judiciales en relación con la lucha contra el despido colectivo".

Azpiolea declarará por los daños producidos en un autobús que transportaba al personal de oficina durante las jornadas de huelga contra el ERE que supuso el despido colectivo de 83 trabajadores y que finalmente fue anulado por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco.

El comité ha asegurado que la empresa "no ha dudado en ampararse en un falso testimonio" y en un "irregular auto" redactado por la Ertzaintza y ha denunciado que la intención de la empresa es "encausar a más compañeros en busca de las mayores condenas judiciales".

Para el comité de empresa se trata de "un claro ejemplo de intentar criminalizar la lucha por el mantenimiento del empleo y de persecución sindical para amedrentar a la plantilla".