El gasto en pensiones en el Estado español, en relación al Producto Interior Bruto, sigue estando por debajo de la media de los principales países de Europa continental pero se mantienen las dudas sobre la capacidad del sistema para mantener a medio plazo el sistema de prestaciones actual, al menos sin cambios. Casi nadie cuestiona un sistema público de pensiones pero hay realidades insoslayables: La mayoría de los jóvenes vascos, entendidos como tales los de la generación de los denominados millennials, nacidos entre 1978 y 1999millennials, creen que sería preciso una reforma del sistema.

En concreto, siete de cada diez millennials, según la IX encuesta elaborada por el Instituto BBVA de Pensiones.

Históricamente, bancos y aseguradoras aprovechan los dos últimos meses del año para recordar lo mal que está el sistema público de pensiones para intentar que los ciudadanos se acerquen a sus pensiones privadas y les dejen las pertinentes comisiones pero, hasta ahora, la Seguridad Social ha aguantado aunque es también una realidad que difícilmente se podrán mantener a medio plazo pensiones de jubilación de 1.434 euros al mes, que es la media en la CAV, o de 1.319 euros, en Nafarroa, cuando el salario medio, según Adecco, es de 1.994 euros brutos en Euskadi y de 1.886 euros en tierras navarras. Máxime, cuando el sistema de pensiones español es de reparto y solo hay 19 millones de cotizantes a la Seguridad Social para sostener a 9,7 millones de pensionistas.

De ahí, que un 49% de los citados jóvenes vascos se cuestione el que pueda llegar a recibir una pensión pública en el momento de su jubilación, según la encuesta del BBVA.

Consciente de esa realidad, el Gobierno español quiere facilitar que cada persona que comience a trabajar tenga una "adscripción automática" a un plan de pensiones complementario, de forma que pueda ahorrar y al llegar a su edad de jubilación cuente con un "complemento significativo", teniendo en cuenta que "el ancla es el sistema público de pensiones", según señaló el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, en un foro sobre pensiones organizado por Cinco Días .

Escrivá defendió los planes de pensiones complementarios colectivos pese a que en España, no tanto en Euskadi gracias a las EPSV, han sido y son un fracaso absoluto, con solo un 3% del PIB ahorrado en ellos.

Por ello, el Gobierno español quiere desarrollar los planes de pensiones colectivos de empleo para tratar de alcanzar a la mitad de la población ocupada, multiplicando por cuatro su penetración actual.

Este planteamiento intenta contestar a las interrogantes de los jóvenes vascos que, según la encuesta del BBVA, consideran en un 61% de los casos que el aumento del déficit de la Seguridad Social amenaza la viabilidad futura del sistema.

Estas expectativas, según el Instituto BBVA de Pensiones, explican por qué un 72% de los vascos menores de 40 años de edad estima necesario reformar el sistema de pensiones. En todo caso, casi tres de cada diez encuestados en el País Vasco (32%) afirman que ya han comenzado a ahorrar para la jubilación.

Un hecho a destacar es que entre los millennials encuestados en Euskadi, los que dedican habitualmente una parte de sus ingresos mensuales a algún producto de ahorro se aproximan a la mitad (48% frente a solo el 35% en el conjunto del Estado español).

Lógicamente, una parte sustancial de los que no ahorran habitualmente para su jubilación aseguran que sus ingresos no se lo permiten.

BBVA

Siete de cada diez vascos de menos de 40 años considera que hay que reformar el sistema de pensiones. Seis de cada diez cree que el déficit amenaza la viabilidad del sistema público y algo menos de la mitad teme no poder cobrar una pensión pública en el día que llegue su edad de jubilación y más de la mitad quiere hacerlo no después de los 65 años.

Gobierno

El Ejecutivo español quiere extender la cobertura de los planes de pensiones de empleo a más de la mitad de población ocupada.

Cifras

La pensión media es de 1.434 euros al mes en la CAV y 1.319 euros en Nafarroa .