La dirección del IMQ pedirá el viernes autorización a sus accionistas para iniciar la búsqueda de un socio estratégico en el que apoyarse para "garantizar" el relevo generacional en la compañía. Según un informe encargado por el consejo, es imprescindible contar con el respaldo de ese accionista externo, que complementaría la entrada de nuevos socios médicos.

En su planteamiento, que deberá ser refrendado en la junta de mañana, la dirección del Igualatorio asegura que establecerá líneas rojas: mantenimiento de la identidad, del arraigo y de la sede social en Euskadi, así como un compromiso para preservar el actual nivel asistencial y el empleo.

"No hay ninguna operación en marcha con Adeslas y el objetivo no es una venta global del IMQ", aseguró Beatriz Astigarraga, presidenta del consejo de administración de la compañía, en una entrevista concedida a DEIA. Además, Astigarraga quiso dejar claro que lo que se va a solicitar en la junta de este viernes es permiso para explorar esa vía y que, en el caso de permitirse la entrada de un socio estratégico, accedería con la "menor participación posible", ya que el objetivo es que la sociedad de médicos siga manteniendo el control del IMQ.

La asamblea marcará por tanto un camino, pero la meta se alcanzará los próximos meses. A la espera de ver cómo afrontan las dos posiciones polarizadas la cita, la presidenta considera que hay mucho partido que jugar y confía en que haya el máximo consenso posible y "deportividad" a la hora de asumir el resultado.

El debate nace de la petición de la Plataforma de Accionistas del Igualatorio (PAI) de liberalizar la venta de acciones y fijar un valor adecuado de las participaciones para facilitar su salida del accionariado. Posteriormente, otro grupo de médicos se unió en la Asociación en Defensa del Modelo de Igualatorio (Ademi) con el objetivo de que ese proceso fuese ordenado, primando la entrada de nuevos accionistas médicos y potenciando la compra de autocartera por parte del propio Igualatorio. Garantizar en definitiva que el control se quede en casa y evitar que Adeslas, que ya posee un 45% de IMQ Seguros, gane más peso en el conjunto de la empresa y sea quien tome las decisiones en el futuro.

compra de autocartera

El informe encargado por el consejo a la consultoría PKF Attest admite que se puede explorar la autocartera, pero matiza que la viabilidad de la compañía estará en riesgo si se destinan demasiados recursos propios a comprar acciones.

En ese contexto, recomienda la entrada de un socio estratégico que soporte parte del peso del traspaso de acciones. En la junta se definirá un nuevo valor razonable de los paquetes de 1.000 acciones que tiene cada médico, que en estos momentos se sitúa en 99.000 euros y puede duplicarse.

Si el consejo logra el permiso para explorar la entrada de un socio externo ese será el precio de referencia. También lo será para los médicos que quieran comprar su participación a los que abandonen la compañía. Para facilitar ese relevo generacional el consejo planteará la posibilidad de trocear los paquetes de acciones o, en el caso de los médicos que trabajan en el Igualatorio pero no son socios, establecer una fórmula plurianual en la que los facultativos podrían dedicar una parte de su salario a financiar la operación.

Astigarraga insistió en que la junta de mañana debe definir el terreno de juego para que los accionistas que lo deseen puedan abandonar la compañía, garantizando que los que se quedan lo hagan en una estructura viable, y que no hay ninguna decisión tomada. Aunque reconoció que Adeslas está bien situada y que han sondeado su disposición a ser ese socio estratégico, serán, añadió, los accionistas los que establezcan el rumbo en la asamblea.

La dirección intentará en ese sentido vencer la resistencias que hay a la entrada de una compañía externa en el capital. "El objetivo prioritario es dar al asegurado el servicio que se merece, el que le hemos prometido, que tenga la mejor medicina posible, y necesitamos recursos en la compañía para que eso lo podamos cumplir. Y si destinamos demasiados recursos propios al relevo es posible que no lo podamos garantizar", subraya.

Desde el consejo también se defiende que "un potencial socio deberá asumir como objetivo prioritario mantener el modelo que tan bien ha funcionado durante sus 86 años al servicio de sus asegurados y, en general, de la sanidad del País Vasco".

La edad

La mitad de los accionistas no está en activo, pero en el futuro serán mayoría, sostiene IMQ. De los 600 médicos activos, casi el 50% tiene entre 60 y 70 años. Solo hay 124 médicos con menos de 50 años. Un 25% de los socios quiere vender ahora y un 69% en el futuro. Pero la mayoría quiere que los médicos conserven la propiedad.

Propuesta

La dirección planteará mañana en la junta la apertura del capital a un socio estratégico, lo más probable que Adeslas, al margen de la entrada de nuevos médicos.