- El plan de apoyo del Gobierno español al sector del automóvil, la primera industria de Euskadi con cerca del 20% del PIB, contará como ya se había adelantado con un presupuesto de casi 3.750 millones de euros (de los que 1.535 millones se adjudicarán a lo largo de 2020, y los 2.210 millones restantes en 2021) y hará especial hincapié en la transformación del sector hacia un futuro más sostenible, con un destacado apoyo al vehículo eléctrico pues un ciudadano que renueve su automóvil y compre un coche eléctrico podrá acceder a una subvención de 4.000 euros frente al máximo de 800 euros que percibirá el cliente que adquiera uno de gasolina o gasóleo.

El proyecto del Ejecutivo español está basado en cinco pilares principales: la renovación del parque móvil que cuenta con 12,6 años de media, las inversiones y las reformas normativas, el I+D+i, la fiscalidad y las medidas de formación y cualificación.

Este plan está en la línea de lo que solicitó ayer el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, partidario de acelerar el proceso de descarbonización y, por tanto, de electrificación de la economía, incluido el transporte ligero, como medida para acelerar la salida de la profunda crisis generada por la pandemia de coronavirus. En concreto, el máximo responsable de Iberdrola pidió “acelerar” a 2025 la hoja de ruta para la próxima década que representa el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) del Gobierno para el despliegue de capacidad de renovables, ya que supondría una inversión de más de 32.000 millones de euros y generaría 90.000 empleos, “especialmente en los ámbitos rurales”.

El denominado Plan de Impulso de la Cadena de Valor de la Industria de la Automoción, presentado por el Ejecutivo español contempla un plan Renove, alejado de la total neutralidad tecnológica que defiende el Gobierno vasco y la industria, pero menos drástico de lo que se temía al principio con la demonización de los motores de combustión y la apuesta solo por los de energías alternativas, básicamente modelos eléctricos que, curiosamente, apenas se producen en las plantas españolas. Así, el Gobierno español dará ayudas a clientes particulares de 4.000 euros a la adquisición de un vehículo con etiqueta cero emisiones, básicamente eléctricos, y de hasta 800 euros en caso de comprar un coche de combustión diesel o gasolina con etiqueta A, porque uno normal solo tendría derecho a 400 euros. Eso sí, las marcas fabricantes de automóviles se comprometen a poner otro tanto dinero al menos. Como se recordará en el caso vasco está cifra es de 2.000 euros.