DONOSTIA - La construcción registró en 2019 otro buen año en la Comunidad Autónoma Vasca con un incremento de su actividad del 7,9% mientras que el empleo también subió un 3,2%. La evolución positiva de este sector económico durante los últimos años en Euskadi permite concluir que atrás quedó una crisis que golpeó con dureza a la actividad constructora hasta dejarla en una maltrecha situación de la que le costó recuperarse más que otros sectores como el industrial o servicios.

Los ritmos de crecimiento, no obstante, no han sido homogéneos. Según dio a conocer ayer el Instituto Vasco de Estadística Eustat, la construcción creció seis puntos porcentuales en 2017 y fue un año después cuando su actividad se incrementó más del doble, un 13,5%. Este buen comportamiento, por otro lado, se alineó con la positiva evolución en general de la economía vasca durante 2018.

El pasado año el crecimiento porcentual no fue tan elevado y llegó al 8%. Una buena cifra de tener en cuenta que el año anterior había sido especialmente positivo, por lo que la construcción en la CAV vuelve a mostrar su capacidad de evolucionar al alza siempre que el entorno económico también presente condiciones beneficiosas.

El sector además creció gracias a sus dos subsectores, con un protagonismo de la edificación, que subió un 8,3% frente al 4,5% de la obra civil. Se demuestra así que la construcción de viviendas se recupera de una manera más acelerada que el de la obra civil.